La ONU condenó la «ejecución» de un terrorista palestino a manos de un soldado israelí, en lo que calificó de acto «horrible, inmoral e inicuo».
«Condeno con firmeza la aparente ejecución extrajudicial de un atacante palestino en Hebrón, en Cisjordania», afirmó en un comunicado el enviado especial de la ONU para Oriente Medio, Nickolay Mladenov.
«Se trata de un acto horrible, inmoral e inicuo que sólo avivará la violencia y hará aún más volátil la situación actual», destacó.
Un soldado hebreo fue arrestado por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y acusado de asesinato por haber rematado de una bala en la cabeza a un terrorista palestino que yacía abatido tras haber atacado a otro militar israelí.
El video, publicado en internet por el grupo israelí de derechos humanos BTselem, muestra uno de los casos más flagrantes de uso excesivo de la fuerza por parte de soldados de la FDI desde el inicio de la ola de violencia que se registra en la zona desde inicios de octubre.
El enviado de la ONU agradeció la condena inmediata de ese acto por parte del ministro de Defensa israelí, Moshé Yaalón, y llamó a las autoridades a juzgar rápidamente al presunto verdugo.
También las asociaciones propalestinas denunciaron el hecho como una «ejecución», mientras que los palestinos lo calificaron de «crimen de guerra».
Tanto el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, como Yaalón, condenaron lo ocurrido prometiendo actuar «con la mayor severidad contra los culpables».
No así otros miembros de la clase política israelí: el ex ministro de Exteriores, Avigdor Liberman, ultranacionalista y conocido por sus posturas incendiarias, consideró «hipócrita e injustificado» actuar contra el soldado.
«Más vale que un soldado cometa un error y siga vivo a que se deje matar por un terrorista por haber titubeado», dijo.
Moralmente hablando, un terrorista que intenta asesinar a judíos, merece morir», aseguró por su parte Bezalel Smotrich, diputado de Habait Haiehudí, partido ultranacionalista religioso incluido en la coalición gubernamental.
Por su parte, el líder de la Lista Árabe Conjunta y diputado, Aymán Odeh, condenó la acción y señaló que «Israel se convirtió en los últimos meses en un lugar en el que las ejecuciones son llevadas a cabo en público animadas por masas que las aplauden».
Odeh añadió que «el Gobierno de Israel trata de proteger su imagen como un Estado donde impera la ley, pero en la práctica sus ministros llaman una y otra vez al público a ejecutar a cualquier sospechoso».
El parlamentario de la tercera fuerza política de Israel demandó que los responsables de actos semejantes sean llevados ante la justicia y paguen por sus crímenes.
La dirigencia palestina condenó lo que considera «ejecuciones extrajudiciales» por parte de las FDI y civiles israelíes de palestinos, y en un informe de principios de mes elevó a 36 los casos de este tipo de ejecuciones desde mediados de septiembre.
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