La nueva alcaldesa de la localidad Collado Villalba, en la Comunidad de Madrid, Mariola Vargas, pidió perdón a la comunidad judía española por haber utilizado la expresión «perra judía» durante un examen que promovió esta semana la presidenta del Partido Popular (PP) de Madrid, Esperanza Aguirre, a los candidatos de su formación a las alcaldías.
Durante esta prueba ante medios de comunicación y miembros de su partido, al ser preguntada reiteradamente por la pérdida salarial que la conllevaba estar en el Ayuntamiento, la ya alcaldesa lanzó en un determinado momento la expresión «No soy una perra judía. Gano mil euros más al mes como médico».
En declaraciones a la prensa, tras jurar el cargo como alcaldesa de la localidad, Vargas señaló que «ya pedí perdón por escrito a la Federación Española de Comunidades Judías porque utilicé una expresión coloquial, muy madrileña, pero muy desafortunada», reconoció.
«Sabén que soy una mujer muy religiosa y mi doctrina me indica todo lo contrario, que tengo que rezar por todo el mundo. Cuando dije perro judío era una expresión coloquial, sin más», aseguró.
Lo cierto es que después de lamenter su expresión, Vargas afirmó que afronta el cargo con «mucho vértigo, con mucho trabajo, con mucha preocupación y con responsabilidad».
«Haré alguna modificación. Mi perfil social me lleva a hacer una serie de reajustes en este sentido, para dar más importancia a las personas», resaltó luego de señalar «coloquialmente» que no es «una perra judía».
Mariola Vargas está casada y tiene tres hijos, lleva más de siete años como concejal del Ayuntamiento de Collado Villalba, y en esta última Legislatura se desempeño como la cuarta teniente de alcalde, al frente de las concejalías de Familia, Servicios Sociales, Sanidad, Consumo, Mujer y Mayores.
Licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Madrid y diplomada en Geriatría, fue médico en Equipos de Atención Primaria, desde 1992 hasta 2011, desempeñando su profesión en varios centros de salud de la Comunidad de Madrid.
Vargas presidenta de la comisión de Sanidad de la Federación Madrileña de Municipios.
Cabe destacar que ningún líder del PP, como el jefe de Gobierno, Mariano Rajoy, o el ex líder del Ejecutivo, José María Aznar, que tanto se vanaglorían por apoyar a Israel, no se pronunció al respecto.
Al parecer, ser «perro judío» es una exteriorización muy antigua y demasiado común en la sociedad española, a la cual nadie le presta atención.
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