La oficina antiterrorista israelí, dependiente de la oficina del primer ministro, advirtió a ciudadanos israelíes y judíos de cualquier lugar que no viajen a Túnez porque existe un alto riesgo de que se produzcan ataques contra ellos.
El aviso de seguridad, incluido en la guía anual de consejos de viaje, va dirigido especialmente a los que pensaban visitar la isla de Djerba durante la fiesta de Lag Baomer, que se celebra el próximo jueves 7 de mayo.
Según la tradición, en esta fecha hay peregrinaciones en Israel hacia las tumbas de los grandes rabinos, pero estos actos también se replican en Túnez, especialmente en Djerba, donde habita una de las últimas comunidades judías del mundo árabe y a donde viajan muchos extranjeros para celebrar la fiesta.
La sinagoga de La Ghariba, en Djerba, construida sobre las ruinas de una anterior edificada hace casi 1.900 años, atrae a peregrinos judíos cada año en el aniversario de la muerte del rabino Shimón Bar Yojai, autor del «Libro del Zohar» y considerado el padre de la Cabalá.
Túnez se enfrenta desde la revolución de 2011 a un auge del movimiento yihadista, que mató a varias decenas de civiles, militares y policías.
En 2002, 21 turistas fueron asesinados en un ataque terrorista allí un mes antes de la festividad, que celebra la comunidad judía de Túnez, una de las más antiguas y grandes del norte de África.
La oficina antiterrorista alertó de que el nivel de posibilidad de que se produzca un atentado es muy alto y pidió que se tenga un especial cuidado después de que el pasado marzo, 23 personas fueran asesinadas en un ataque en el Museo Bardo. Entre las víctimas había 19 turistas.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) se atribuyó entonces la responsabilidad del atentado y lo describió como una «invasión bendita de una de las guaridas de infieles y vicio en el Túnez musulmán». Además, anunció que cometería más ataques.
Por su parte, el Ministerio de Interior tunecino negó que en estos momentos haya una alerta real de ataques contra israelíes y judíos en Túnez.
«No tenemos nada sobre eso. No hay amenazas de atentado», declaró un responsable de dicha secretaría.
«Fueron tomadas todas las medidas para garantizar el éxito de la peregrinación de la Ghariba. Las fuerzas del orden y el ejército están listas para garantizar la seguridad», agregó el funcionario.
Pero la oficina antiterrorista israelí elevó el nivel de alerta de seguridad en el país al 2, hecho que significa que existe una amenaza concreta de ataques.
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