Israel se prepara para afrontar, «tanto a nivel político como diplomático», la nueva política de la Unión Europea (UE) para que los supermercados europeos marquen con claridad el origen de los productos de los asentamientos Cisjordania, según fuentes diplomáticas israelíes.

«Israel se prepara desde hace tiempo para afrontar, política y diplomáticamente, este tema. Estamos trabajando para convencer a la UE y a los estados miembros de que se trata de un decisión errónea y que arrastra una elemento claro de discriminación», dijeron las fuentes en un comunicado respecto a una información difundida el diario «Haaretz».

Según este medio, las nuevas disposiciones se publicaran el 11 de noviembre, y aunque las fuentes israelíes agregaron que no es exacta, reconocieron que «se esperan en cuestión de días».

Se trata de una decisión que la Comisión Europea (CE) adoptó hace ya meses dentro de una política para proteger la solución de dos Estados en Oriente Medio frente a la colonización judía del territorio destinado para el Estado palestino.

Para Israel, que protestó sin éxito esa medida que según el citado medio podría entrar en vigor de forma inmediata, las nuevas regulaciones «no contribuyen al proceso de paz».

«Al contrario, las disposiciones europeas en este momento son un premio al terrorismo y al rechazo palestino a reiniciar negociaciones», subrayaron, además de considerar que alentarán «el ambiente de boicot contra Israel» y mostraron su esperanza de que la UE reconsidere su posición.

Según el rotativo, Israel no tiene elementos de juicio sobre el alcance de las medidas porque el grupo de trabajo de la UE que las está elaborando lo hace en la máxima reserva para eludir todo tipo de presiones.

En abril pasado, los ministros de Exteriores de 16 países de la UE enviaron una carta en la que animaban a la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, a acelerar la creación de un etiquetado especial para los productos de asentamientos israelíes considerados ilegales.

Esos ministros animaban a Mogherini a tomar la iniciativa dentro de la CE para completar el trabajo sobre unas directrices sobre el etiquetado de los productos de los asentamientos israelíes.

Esa carta la firmaron los ministros de Bélgica, España, Reino Unido, Francia, Dinamarca, Irlanda, Croacia, Malta, Holanda, Suecia, Portugal, Eslovenia, Italia, Luxemburgo, Finlandia y Austria.

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