El asesino de Yitzhak Rabin ha permanecido recluido en confinamiento solitario durante 15 años; el juez afirma que el extremista constituye “un objeto de admiración” para las facciones extremistas.
El Tribunal Central de Distrito de Petah Tikva decidió el lunes que Yigal Amir deberá pasar otros seis meses en confinamiento solitario.
Amir ha permanecido aislado en su reclusión desde que fuera sentenciado a cadena perpetua sin libertad condicional más 14 años adicionales por el asesinato del primer ministro Yitzhak Rabin en noviembre de 1995.
En los informes de inteligencia presentados al tribunal, los funcionarios del Shin Bet manifestaron que mantener a Amir en una celda común junto a otros prisioneros supondría un grave riesgo de seguridad nacional.
Funcionarios del Servicio Penitenciario defendieron esa afirmación, ya que, debido a la naturaleza de los delitos por los que fue condenado Amir, su vida podría correr riesgo en caso de ser puesto junto a otros presos.
Según declara el juez Abraham Tal, el asesino de Rabin constituye todo “un objeto de admiración” para las facciones extremistas.
El abogado de Emir, Ariel Atari, se quejó de que Amir haya permanecido en confinamiento solitario durante 15 años, el período más largo que haya cumplido ningún preso en Israel.
Sin embargo, en el fallo del lunes, el juez aseguró que a Amir se le ha concedido también una serie de beneficios que normalmente no se ofrecen a los presos en aislamiento.
Continuando con la flexibilización de las condiciones de reclusión del prisionero, el tribunal dictaminó que Amir podrá reunirse con otro preso tres veces por semana para estudiar la Torá, y pidió al Servicio Penitenciario evaluar la posibilidad de incluir a otros prisioneros más en dichas sesiones de estudio.