La policía israelí convocó a varios líderes de las protestas sociales del verano pasado para entrevistarlos con el fin de mejorar la preparación de sus fuerzas para la repetición de las manifestaciones de este verano.

Algunos activistas recibieron citaciones por correo, mientras que otros han sido visitados personalmente por los funcionarios. Una visita ocasionó un poco de ansiedad en la casa de Tamir Hajaj, quien dijo que su hija de 17 años lo llamó en estado de pánico para decirle que la policía había llegado a su casa a buscarlo.

Hajaj, quien durante el año pasado se mantuvo en contacto con la policía para informarles sobre eventos y manifestaciones que organizó, trató de explicar el hecho: «Creo que es porque soy uno de los líderes de las protestas sociales y recibí un permiso para levantar una carpa grande en la Plaza Rabín en Tel Aviv el 1 de julio. Todo el mundo sabe que va a ser el pistoletazo de salida del verano y, al parecer, les daba miedo».

«Estoy en shock con el hecho de que la policía opte por venir a buscarme a mi casa. Hay una manera mucho más fácil de encontrarme. Esto huele un poco a pescado podrido», dijo.

La directora ejecutiva de la ONG Hakeshet Hamizrahí (Arco Iris Oriental, en hebreo), Yael Ben Yefet, que hasta hace poco estaba en el Ayuntamiento de Tel Aviv en representación del partido de la oposición Ir Lekulanu (Ciudad para todos), también recibió una citación misteriosa.

«Es absurdo. Esto me recuerda a los regímenes opresores, El propósito es asustarnos. Es incomprensible que personas estén siendo citadas por cualquier supuesto delito. - declaró Ben Yefet - Yo no sé si voy a ir, ya que de acuerdo a las consultas que he hecho, la convocatoria no es legal».

Por su parte, la policía emitió una declaración por la cual dejaba en claro que no se refería a cualquier activista en particular, y que todo era con el fin de «prepararnos a nosotros mismos de una mejor manera para los meses de verano».

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