Investigadores de la Universidad de Tel Aviv publicaron un informe que recomienda a los padres comer junto con sus hijos en familia, informó el diario Yediot Aharonot.
El informe señaló que comer juntos en familia, incluso una o dos veces a la semana puede incentivar el consumo de frutas y verduras a 400 gramos al día.
Los científicos descubrieron que el simple consumo de los padres a las frutas puede aumentar las ganas en los hijos de manera significativa.
Lo grave de este informe es que el 63% de los niños no cumplen con el estándar establecido por el ministerio de Salud de Israel y la Organización Mundial de la Salud de cinco piezas diarias.
La mayoría de ellos se nutren de las llamadas «comidas basura» principalmente durante su estancia en escuelas o jardines de infantes.
Según afirmó el Profesor Daniel Toledano, que dirigió el estudio, «en las familias donde los padres dicen comer frutas y verduras todos los días, los niños mantenían un promedio de una porción de 80 gramos más que aquéllos qu nunca o rara vez lo hacen».
Toledano señaló que «el sistema y ritmo de vida en Israel a menudo impide que toda la familia se siente siempre a desayunar, almorzar o cenar junta; pero incluso comer sólo los fines de semana, todos reunidos en la mesa, puede ayudar a mejorar de forma drástica la alimentación de los niños.
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