Antes que nada, quiero dar mi más sincero pésame a toda la familia Foguel y a los amigos de estas víctimas del terrorismo salvaje y asesino.
Se puede estar a favor de cualquier causa política, incluso la palestina, pero no hay justificación alguna para esta inhumana masacre.
Que estén seguros los asesinos y quienes los envían que tarde o temprano pagarán muy caro sus sangrientos crímenes
Todo tiene un límite.
Entre los seres humanos existen quienes nacen para vivir y ayudar a otros y los que están para destruir y matar. A éstos últimos no hay ninguna manera de reconducirlos a una vida básica y natural. No queda más remedio que hacerlos desaparecer de la faz de la tierra,
Quien o quienes son capaes de llevar a cabo semejante massacre, o quienes la aplauden, no son personas, son monstruos a los que hay que poner en sitios bien profundos de los cuales no puedan volver a cometer sus barbaridades.
Pero los criminales no son sólo los que ejecutaron la matanza, para esos dementes no hay sustantivos, sino también quienes relativizan semejante salvajismo y empiezan a hablar de politica . Ellos son asesinos en el sentido más claro de esa palabra y son tan respnsables como los primeros, sólo que se salvan porque la ley no los abarca.
Por ejemplo el portavoz de Hamás, Sami Abu Zuhri, quien afirmó que su organización apoya "estas operaciones de resistencia contra los ocupantes".
La paz fue nuevamente acuchillada, la paz agoniza, desgraciadamente Israel no quiere imponer la pena de muerte a los terroristas. Personalmente, creo que sería parte de la solución.
Saludos cordials.
Boris Saar
Ramat Gan