A pesar de lo que muchos medios de prensa dicen, la actual confrontación bélica que estamos padeciendo fue originada por los continuos ataques a la población civil del sur de Israel desde la Franja de Gaza, gobernada por Hamás. Hamás es una organización fundamentalista islámica, declarada terrorista por Europa y Estados Unidos, que no reconoce el derecho a existir de Israel y que, armada por el régimen teocrático de Irán, lanza sobre población civil israelí ataques y misiles en forma permanente.
Israel es un Estado que trata de ser lo más democrático y que se encuentra con dos aptitudes ya enfrentadas, los nuevos judíos del siglo XXI y lo que se han quedado en el pasado.
Llevamos más de 100 años sumergidos en un mismo conflito. Asistimos a una nuena ola de violencia entre Israel y los palestinos sin un número de rounds determinado.
Más de lo mismo; siendo lo mismo la destrucción y la muerte indistinta. Ya deberíamos estar cansados de este «reality show» macabro; pero no; ahora continuamos discutiendo sobre quién ganó, perdió o si terminó en empate.
1- Un ladrón vulgar te roba el dinero, el reloj, la cadena, el auto y/o el celular. 2- Un político te roba la felicidad, la salud, la vivienda, la educación, la pensión, la recreación y/o el trabajo. 3- El ladrón vulgar te elige a tí. 4- Al político lo eliges tú. Para analizar y pensar.
La Confederación Sionista Latinoamericana (COSLA), entidad que nuclea a las federaciones sionistas de la región, expresa su más profunda solidaridad con el pueblo y el gobierno de Israel, cuya población civil se ha visto sometida a constantes e indiscriminados ataques con cientos de misiles disparados desde la Franja de Gaza controlada por Hamás.
Si bien se trata de una acotación marginal en el contexto de tu artículo «Bibi y el interés nacional», por su significado creo conveniente enviarte mi opinión respecto de la expresión: «Israel amenazado por el colapso financiero de Europa».
Aducir que el gigantesco agujero presupuestario del gobierno es motivado por la crisis económica europea o internacional es una gran falacia que induce a un grave error de apreciacion y sirve de escudo para descubrir el verdadero motivo.
Los Acuerdos de Oslo establecen que israelies y palestinos solucionarán sus diferencias en forma bilateral, sin recurrir a terceros. También dictan una secuencia progresiva: diálogo, debate, acuerdos, aplicación de acuerdos y finalmente reconocimiento de un Estado palestino.
En estos momentos en que el programa nuclear iraní, el aumento del costo de la vida, el peligro de una guerra, los misiles que siguen cayendo, la bronca con EE.UU, la primavera árabe y la elecciones no nos dejan vivr tranquilos, es hora de calmarnos, tomarnos la vida con un poco más de calma y tratar de disfrutar lo más posible.
Ahora que Bibi llamó a elecciones cabe esperar que éstas se lleven a cabo. Israel ya vivió todas las experiencias posibles y ya una vez nos dimos cuenta que nos fuimos a dormir con elecciones y nos despertamos con una coalición de 94 diputados impotentes que en su primera y única experiencia desaparecieron.
Los discursos de Obama, Netanyahu y Ahmadinejad en la ONU mostraron que los tres se mantienen firmes en sus posturas.
Ahmadinejad afirmó que Irán seguirá avanzando en su programa nuclear. La República Islámica continuará ocultando información a la AIEA y amenazando a Israel con alusiones a la necesidad de que el Estado judío sea borrado del mapa.
La reelección de Barack Obama confirma que EE.UU, pese a la crisis, sale adelante con un 8% de paro y un 2% de crecimiento.
Inversión pública, lucha contra el paro, potenciación de la indústria de autos, energías renovables y baja de la dependencia del petróleo, aprobación de salud para todos y defensa de asistencia social para todas las capas sociales.
Cristina Kirchner confesó haberse confundido al descubrir que los alfajores, que estaba convencida que eran un invento argentino, son en realidad un dulce árabe.
Bibi Netanyahu decidió poner fin a su mandato y llamar a elecciones anticipadas al considerar que su popularidad es suficientemente grande como para tener asegurada la reelección.
Netanyahu no quiso arriesgarse a perder esa ventaja en los próximos meses para los que prevé serios problemas económicos y políticos.
Yom Kipur es el día en que intentamos rearmar con los fragmentos dispersos y desgastados de nuestras vidas e historias personales un todo coherente, para saber quiénes somos, qué queremos y hacia donde vamos, aunque sea una vez al año.
Tengo la sensación desde hace algún tiempo que un relente de fascismo se extiende por nuestra sociedad israelí y no nos damos cuenta de ello.
Estamos en una pendiente resbaladiza y muy peligrosa. Netanyahu y Liberman impulsan constantemente iniciativas y una legislación que están en el límite.