Desde ahora, los israelíes también podemos disfrutar de una exquisita grappa. Hace apenas unos días atrás se llevó a cabo en la ciudad de Herzlía la presentación oficial de la colección de grappas de la renombrada destilería italiana Berta.

Giovanni Bocchino, gerente de ventas de la destilería, llegó especialmente de Italia para el evento y disertó ante un grupo selecto de periodistas especializados y catadores acerca de las cualidades especiales de dichas grappas. Durante el acontecimiento se fueron degustando una a una toda la gama que se distribuye en Israel.

Berta es una de las destilerías de mayor prestigio del norte de Italia. Está situada en el corazón del Piemonte, donde se encuentran las antiguas culturas vinícolas de Langhe y Monferrato.

Sus destilados son el resultado de los conocimientos adquiridos y la experiencia acumulada desde su fundación en 1947. La familia posee dos destilerías: la más antigua se encuentra en Nizza Monferrato y la segunda está situada en Casalotto di Mombaruzzo.



La grappa es originaria de la ciudad de Bassano de Grappa en el norte de Italia, tiene una graduación alcohólica que varía entre 40 y 50 grados y se elabora a partir de la destilación del bagazo de uva resultante del prensado para la obtención del mosto.

Las hay en varias categorías: varietales, blends, jóvenes, añejas, con o sin crianza, generalmente es transparente, pero cuando se envejece en toneles adquiere un color ambarino.



Su sabor es similar al de vino pero en realidad depende de la calidad, graduación y variedad de uva.

Se elabora en diferentes países: en España es el orujo, en Francia el marc, en Alemania el trester schnapps, en Yugoslavia el komovica y en Portugal el bagaceira. En Uruguay se la consume con miel y limón, mezcla que se conoce con el nombre de grappamiel.



A la hora de servir una grapa añeja se la puede acompañar con quesos fuertes como el roquefort o comidas elaboradas a base de jengibre, pimienta o especias muy aromáticas.

Una grapa joven, intensa y transparente se puede acompañar con quesos de cabra de pasta blanda, combinados de sushi o tacos mexicanos. Su temperatura ideal es entre 15º y 18º C.



La grappa, a diferencia de otros destilados como el Cognac o el Armagnac, se elabora a partir de materia sólida: los orujos de la uva. La materia prima llega a Berta en tres formas: fresca, semi-fermentada o fermentada.

En el primer caso, y debido a que no hay presencia de alcohol para poder destilar, se macera la brisa con una parte de mosto y se deja fermentar en unos depósitos de 225 litros - especialmente diseñados por la destilería - con el fin de conservar sus propiedades y frescor.



En el caso de los orujos fermentados y semi-fermentados, pueden destilarse directamente, aunque los segundos pierden una parte de alcohol que todavía se encuentra en forma de azúcares.

En todas las grappas de Berta se especifica la añada, excepto en la Elisi. Desde las grappas jóvenes (blancas) a las envejecidas, destaca una gran finura y la integración del alcohol.



La grappa Berta llegó a Israel gracias a la iniciativa de Yohav Shimoni, quien dirige Picolla Pasta, uno de los restaurantes más sofisticados del país. Se trata de productos selectos. Los precios van desde 870 NIS para la edición Regionali hasta 3.850 NIS para el Reserva Paolo Berta de 20 años de añejamiento.