El pueblo judío, tanto en Israel como en la diáspora, tiene el privilegio de poder movilizar a dos prominentes intelectuales hispanoparlantes para su defensa en las continuas batallas mediáticas .
Marcos Aguinis, prestigioso escritor judío argentino y la renombrada periodista catalana, Pilar Rahola, dedican gran parte de su tiempo y pensamiento para movilizarse en apoyo de la causa sionista.
La táctica predilecta de estos afamados pensadores es exaltar los logros presentes e históricos del pueblo judío y del Estado de Israel a la par de una especial predilección por cargar en contra de ciertas desviaciones que claramente se manifiestan en las sociedades árabes musulmanas.
La desigualdad de género y la discriminación de la mujer es una munición preferentemente disparada en una feroz crítica al fanatismo islámico y sus gobiernos [1].
Sin tomar en cuenta la finalidad común de sus esfuerzos, a Pilar Rahola y Marcos Aguinis los une una relación de amistad y admiración mutua. Expresiones como «mi amigo Marcos Aguinis» o «el gran amigo y extraordinario escritor Marcos Aguinis» o «Marcos Aguinis como siempre magnifico», son parte de los elogios que se pueden encontrar en el blog y los artículos de Pilar Rahola.
Pese a esta conocida camaradería y afinidad de objetivos, da la impresión que en estos días Aguinis le jugó una mala pasada a Rahola.
El 7 de abril pasado se llevaron a cabo las elecciones destinadas a instituir la próxima comisión directiva de AMIA, la poderosa mutual de la colectividad judía de Argentina.
A diferencia de comicios anteriores, en esta oportunidad Marcos Aguinis se movilizó activa y públicamente a la campaña electoral de la lista «AMIA es de Todos» liderada por el Rabino Sergio Bergman. Con la experiencia de los últimos cuatro años de dirección religiosa ortodoxa en esa institución, Aguinis expuso argumentos muy claros y precisos que lo motivaron en su tan significativo paso.
A sabiendas del pasado que «el patriarcado aun continua su rigor entre los ultraortodoxos judíos» [2], a Aguinis le llegó el momento de poner el hombro para «que el próximo presidente de AMIA no sea un ortodoxo, porque los ortodoxos tienen una cerrazón mental. «Hay otras tres listas que son más laicas y que pueden consensuar una comisión directiva que integre a todas las partes y que la AMIA sea presidida por una persona laica y más abierta» [3].
A primera vista, da la impresión que la conducta de Aguinis es propia de una persona realmente preocupada por una conducción discriminatoria y misógina. No podría ser de otra manera tras cuatro años con una dirección que diferencia judíos entre «genuinos» y «no genuinos» y que según el Rabino Samuel Levín, su líder espiritual y político, «la mujer es una ama de casa y los hombres están para los negocios. No todas pueden estar en igualdad con los hombres, Es difícil que tengan la fuerza para manejar la comunidad» [4].
El resultado de las elecciones favoreció los proyectos de Aguines pues las «tres listas más laicas» obtuvieron en conjunto un 57,6% de los votos frente a un 42,4% del «Bloque Unido Religioso (BUR)», la lista de los religiosos ortodoxos.
Sin embargo, fue justamente la lista apoyada por Aguinis, «AMIA es de Todos», quien de inmediato cruzó las líneas para plegarse a los religiosos ortodoxos. «Los Rabinos Sergio Bergman y Samuel Levín, referentes de los partidos «AMIA es de Todos» y «BUR», respectivamente, hablaron por Radio Jai y confirmaron que conformarán una coalición para componer una nueva comisión directiva de la mutual judía tras las elecciones del domingo» [5].
Ante una realidad donde Aguinis aparece como el respaldo público de una lista que llega a un acuerdo con quien se proyecta como un símbolo del Satán discriminatorio judío argentino, sería muy apropiado otorgar al accionar del conocido escritor el carácter de camuflaje con oscuras intenciones políticas. Ni siquiera tiene el derecho de argumentar sorpresa desde el momento que la misma lista «AMIA es de Todos», liderada por el mismo Rabino Sergio Bergman fue quien le dio sustento al BUR para conducir AMIA durante los cuatro años que precedieron las actuales elecciones.
Ante esta clara traición ideológica, sería interesante escuchar alguna consideración o crítica de parte de su amiga Pilar Rahola, aunque nadie se debe sorprender si solamente somos testigos de un incomprensible silencio.
En el pasado ya constatamos cómo sus anteojeras azules y blancas no le permiten a Rahola captar a mujeres judías que son obligadas a vestir burqa tanto en Israel como en Canadá, no ver detenciones policiales de mujeres sólo por rezar con vistiendo el talego judío [6] en el Muro de los Lamentos, no abrir la boca por la separación de mujeres en líneas de autobuses hebreos ni otras claras manifestaciones de discriminación de la mujer en Israel.
[1] «Mujer excluida … ¡qué desperdicio!»; Marcos Aguinis; La Nación; 7.8.09. «La cárcel textil»; Pilar Rahola; La vanguardia; 10.3.11.
[2] «Mujer excluida»; ídem.
[3] «Elecciones AMIA: Aguinis, Kovadlof y Eliaschev participan del cierre de campaña AMIA es de Todos»; Itón Gadol; 5.4.13.
[4] «AMIA se alista para elegir su nueva conducción»; Perfil; 23.3.13.
[5] «Bergman y Levín confirmaron una nueva alianza»; Radio Jai; 9.4.13.
[6] Talit o talego: Antigua indumentaria religiosa judía en forma de chal utilizada en los servicios religiosos.