El viernes 13 de Julio de 2012 será ya una fecha histórica para los latinoamericanos en Israel. En la ciudad de Raanana, en La Explanada de la OLEI Raanana, se celebró la Primera Feria del Libro en Español.

Se dieron cita más de 14 escritores latinoamericanos de reconocida trayectoria, llegados desde Ashdod, Kfar Saba, Raanana, Beer Sheva, Herzlía, Naharía, Haifa, Kraiot, Jerusalen, etc., entres otros, quienes acomodados en sus mesas y bajo el magro cobijo de una sombrilla expusieron sus libros, los vendieron, firmaron e hicieron disfrutar al público en un diálogo «casi» personal entre el autor y el lector.

Además estuvieron presentes el Club de Leones Dan Paz Israel con una muy nutrida asistencia de sus miembros para la venta de libros usados destinados al bien público.

También nuestra OLEI Raanana, presentó un magnifico stand lleno de libros con todos los títulos imaginables, nuevos y seminuevos, para que todos pudieran llevarse a casa un testimonio de la visita. Además se regalaron libros repetidos, cantidades de libros para niños y sobre todo se equipó a las bibliotecas que lo requerian de otras filiales de la OLEI o entidades comunitarias de habla hispana.

Para ello las voluntarias de la biblioteca trabajaron denodadamente durante meses ordenando, clasificando y preparando una cantidad de libros que superó los 2.000 ejemplares.

Un merecido reconocimiento para quienes además del trabajo previo estuvieron en la Feria desde las 8.00 de la mañana hasta después de cerrada la muestra.

Pablo instaló su camioneta en la plaza seca - nosotros le dimos permiso - y no le alcanzaban las manos para vender guaraná de Brasil, alfajores, sidra y cerveza de Argentina, yerba de Uruguay y todo lo que tenía en su «Latino movil», repleto de exquisiteces.

Recorriendo la muestra aparecía el Pabellón de la República de Colombia, atendido por todo el personal de la embajada, con libros, fotos y todo el material típico que trajeron. Nos faltó lugar para que pudieran exhibir todas las cosas tan bellas que aportaron.

Al lado, y como no podía ser de otra manera, respetando la hermandad americana, el Pabellón de Argentina, donde los mates, los adornos y los libros sobre Buenos Aires, el tango y otros temas señalaban a la bandera nacional que decoraba el lugar.

En el interior de la OLEI otros libros resguardados y muy valiosos también se exhibían.

Mientras se podía caminar - a los empujones - descubríamos a una poeta, a una escritora de recetas típicas judias, a cuentistas, el stand de Gustavo Perednik repleto, el de la Sra. Ite de Borger de AMIA, Buenos Aires y a otros escritores famosos al lado de los cuales la gente se arremolinaba pidiendo dedicatorias para tal o cual de la familia. Verdaderamente era para escuchar y filmar.

Entre los ya angostos pasillos, Luli, a cargo del stand de Piedra Libre, regaló cientos de ejemplares de la revista. Por allí Rafa conversaba con los amigos y les entregaba un ejemplar de la revista Mundo Latino; y atrás, protegido un poco del sol abrazador, Lito nos mostraba  todo lo que el diario Aurora y su editorial presentaron; los tres magníficos. Libros y diarios para sentirnos como en nuestros paises de origen; buena lectura con diarios y revistas de obsequio y algún que otro regalito en la compra de los libros expuestos. También la Editorial Kon - libros traducidos al hebreo - estuvo presente.

Los más cómodos estaban sentados en el café - los dueños, encantadores -, nos pidieron que les hicieramos carteles en español para ofrecer sus ofertas, así que entre corridas, los mozos atendian a nuestros visitantes. Otro de los negocios, la florería, sacó mesas para prestarle a nuestros participantes y los demás vecinos curiosos recorrian mirando los títulos latinos pero saboreando nuestros dulces y bebidas.

Una verdadera fiesta; un festival de color y alegría que comenzó antes de la hora prevista, las 10.00, y terminó despues de la hora fijada, las 14.00. ¿Cómo no se iba a llenar de gente linda si en la puerta hizo su aparición el primer autobús trayendo a la gente de Naharía, Haifa, Kraiot y Natzeret? Luego llegaba la de Beer Sheva, Jerusalén, Kfar Saba, Tel Aviv, Herzlía, Ashdod y Natania.

Afuera la fiesta no cesaba y adentro, en las instalaciones de la OLEI, más de 100 personas soportaban estoicamente el calor ya que el aire acondicionado estaba saturado.

El acto oficial dió comienzo a las 10.30 como estaba previsto. José Caro abrió y condujo el evento en nombre de la OLEI Raanana, de la OLEI Central y de todas las filiales de la OLEI del país con sus directivos que se habían dado cita desde muy temprano.

No sólo fue la apertura oficial sino también un momento dedicado al recuerdo por nuestras víctimas por el Atentado a AMIA del 18 de julio. Entre los apretujados asistentes, el embajador de la República Argentina, Carlos F. Garcia y su señora Carmen; el embajador de la República de Colombia, Sr. Isaac Gilinski; la futura embajadora del Estado de Israel en Argentina, Sra. Dorit Shavit; el cónsul honorario de Ecuador, Sr. Jaime Chemaia, a quien no nos cansamos de agradecer por haberse encargado él personalmente de conseguir los autobuses ante el ministerio de Absorción para que la gente pudiera trasladarse gratuitamente hasta Raanana; el cónsul de Honduras, Sr. Jose Ortiz; el Sr. Vargas, ministro consejero de la embajada de Colombia, el encargado cultural de la embajada Argentina, Sr. Manrique Altavista, quien gentilmente ya concretó con nosotros «La Semana del Cine Argentino» en la OLEI de Raanana en los primeros días de septiembre y nos produjo una alegría inmenza. De la municipalidad de Raanana llegaron el viceintendente, Eitán Guinzburg, la consejal, Deby Slutzky, y también nos deleitó con su presencia nuestra querida directora de absorción de la ciudad, la Sra. Nehama Efrati. Pero faltaba el intendente, ¿dónde estaba?, arriba, en la explanada, sacándose fotos y recorriendo cada mesa, cada stand e interiorisándose de todo lo que allí pasaba.

La primera parte comenzó con una actividad cultural. Gustavo Perednik, nuestro invitado estrella, nos brindó una conferencia, como siempre magistral, y recorrió todos los caminos desde la creación del libro, nuestro Estado de Israel, el judaísmo y su relación con el libro y hasta tuvo tiempo para contar anécdotas y jugosos comentarios. Un atronador aplauso rubricó su presentación. Imposible prescindir de él en una Feria del Libro de ésta jerarquía. Un intermedio musical a cargo del «Coro Lejaim», nos hizo cantar y recordar canciones latinoamericanas. Otra ovación para despedir a este grupo que ya trabaja en nuestra OLEI Raanana y que nos obsequió con su actuación.

La segunda parte fué abierta por nuestro Rabino, Dr. Mordejai Maarabi, quien como siempre, con dulces y cálidas palabras se refirió al libro, a la vida y a todo lo que nos incumbe como seres humanos; emocionante, hermoso... Luego el mensaje del embajador argentino, emotivo, familiar, humano, lleno de deseos y proyectos para que realicemos actividades juntos en beneficio de los demás. Siguió en su turno el embajador de Colombia, cálido y entrañable como siempre; con un mensaje de fraternidad, emoción y buenos deseos. Tuvo su espacio la Sra. Dorit Shavit, quien emocionada, recibió de manos del Dr. León Amiras y del Sr. Mario Laib un hermoso recuerdo de parte de la OLEI Central con motivo de su próximo viaje a Buenos Aires para asumir allí la representación diplomatica de Israel. El viceintendente habló, al igual que el intendente, Sr. Nahum Hofri, quien no podía ingresar debido al gentío. Lindas palabras de bienvenida a la ciudad a las autoridades y a la masiva concurrencia.

Para ir ya terminando, el concierto espectacular del maestro Mario Solán -clarinete - y David Solán - guitarra. Un silencio profundo y un aplauso de pie marcó un final que no queríamos pero que ya era inevitable. Brotaba música por parte de estos mágicos artistas. Se sirvió un «Vino de Honor» con motivo de las fechas patrias de Argentina y de Colombia.  

Besos, abrazos y una emoción enorme de todos los presentes. Más de sei horas de espectáculos, conferencias, discursos, saludos y, por supuesto, de un movimiento espectacular entre los libros, los verdaderos agasajados del día.

Dicen que más de 300 personas participaron. A todos, gracias.