Mohamed Aalán (31), un palestino detenido en Israel y en huelga de hambre desde hace unos 60 días, entró en coma, indicó su abogado y el Club de los Prisioneros, una ONG que defiende a los cerca de 5.700 palestinos detenidos por Israel.
La noticia no fue confirmada de lado israelí. Un portavoz de la administración penitenciaria dijo no tener conocimiento de esta información.
En el Hospital Barzilai de Ashkelón, en el sur de Israel, le colocaron un gota a gota de agua salada, explicó el vocero del centro médico.
«El portavoz del hospital donde está detenido Aalán me informó que está en coma», dijo su abogado, Jamil al-Jatib.
«Mohamed Aalán entró en coma y se halla ahora bajo respiración artificial», informó Amani Sarahné, portavoz del Club de Prisioneros.
Aalán, letrado defensor de varios detenidos que habían denunciado su encarcelamiento, fue arrestado en noviembre de 2014 y puesto en detención administrativa, un régimen carcelario controvertido que permite a Israel encarcelar a sospechosos no inculpados por una duración de seis meses renovables indefinidamente.
Aalán, acusado de pertenecer a la organización terrorista Yihad Islámica, inició una huelga de hambre el 18 de junio, precisamente para denunciar la renovación de su detención.
Muchos palestinos recurrieron a la huelga de hambre para denunciar su encarcelamiento, pero el caso de Aalán se inscribe en un nuevo contexto legal.
El Parlamento israelí adoptó recientemente una controvertida ley que autoriza la alimentación forzada de los presos en huelga de hambre si su vida está en peligro.
Los defensores del nuevo texto esgrimen que con él se corta por lo sano con el chantaje de algunos prisioneros, después de la liberación a mediados de julio de Jader Adnán, recibido como un héroe por los palestinos a su salida de prisión tras 56 días de huelga de hambre.
La suerte de Aalán se convirtió en un dolor de cabeza para las autoridades israelíes, a la vez que la movilización de la opinión pública palestina es cada vez mayor. Su abogado dijo que las autoridades israelíes tienen intención de alimentarlo por la fuerza.
Pero para que esta medida sea posible Israel tendría que encontrar médicos dispuestos a forzarlo a comer, algo que no se presenta fácil puesto que la Asociación Médica Israelí se opone a dicha norma.
El Comité Internacional de la Cruz Roja advirtió la semana pasada que Aalán se encuentra en «peligro de muerte inminente».
Los retratos de Aalán pueden verse por todos lados en las zonas de mayoría palestina y también entre los árabes israelíes, mientras su caso acapara medios y redes sociales.
Un millar de personas marcharon en Nablus (Shjem), en Cisjordania. La policía y el ejército israelíes se encuentran movilizados en previsión de las manifestaciones convocadas tras la oración semanal del viernes.
La Yihad Islámica presentó a Aalán como uno de sus miembros y llamó a la «movilización». Su brazo armado, las Brigadas Al Quds, advirtieron desde Gaza que el alto el fuego con Israel (vigente hace un año) acabará si Aalán muere.
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