El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, al primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, mediar para lograr un alto el fuego entre Israel y Hamás y urgió a ambas partes a «restaurar la calma.

En una conversación telefónica, Obama aseguró a Netanyahu que Estados Unidos «sigue preparado para facilitar un cese de hostilidades, incluido un regreso al acuerdo de alto el fuego de noviembre de 2012», que fue mediado por la entonces secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton.

«El presidente Obama reiteró la fuerte condena de Estados Unidos a los continuos disparos de cohetes contra Israel por parte de Hamás y otras organizaciones terroristas y reafirmó el derecho de Israel de defenderse contra estos ataques», indicó la Casa Blanca en un comunicado.

«El presidente Obama expresó su preocupación por el riesgo de una mayor escalada de violencia y enfatizó la necesidad de que todas las partes hagan todo lo que puedan para proteger las vidas de los civiles y restaurar la calma», añadió el texto.

Obama volvió a expresar sus condolencias a Netanyahu y al pueblo de Israel por uno de los detonantes de la actual crisis, el asesinato de tres estudiantes judíos desaparecidos en Cisjordania, y urgió a «llevar a los responsables ante la Justicia», indicó la Casa Blanca.

El presidente estadounidense elogió además el arresto de sospechosos por el secuestro y asesinato del menor palestino Mohamed Abu Khdeir. También manifestó su «preocupación» por la situación de Tariq Abu Khdeir, primo de Mohamed, de nacionalidad estadounidense liberado esta semana tras ser detenido y golpeado por policías israelíes, y tomó nota de «la determinación de Israel para resolver ese caso».

Obama y Netanyahu conversaron también acerca de las negociaciones sobre el programa nuclear de Irán entre Teherán y el Grupo 5+1 (los cinco miembros del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania).

El presidente de Estados Unidos reiteró que Estados Unidos no aceptará ningún acuerdo que no asegure que el programa nuclear de Irán es exclusivamente para propósitos pacíficos», apuntó la Casa Blanca.

En otra llamada, el presidente de la Autoridad Palestina (AP), Mahmud Abbás, instó al secretario de Estado norteamericano, John Kerry, a intervenir para lograr un alto el fuego inmediato.

Kerry habló también con su homólogo egipcio, Sameh Chukri, en un intento para conseguir que El Cairo use su influencia para calmar la situación, tal y como indicó la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki.

«Parte del esfuerzo del secretario Kerry fue ponerse en contacto con los países de la región, incluidos Qatar y Egipto. Cualquier país de la región que pueda jugar un papel para poner fin al disparo de cohetes de Hamás tendrá nuestro respaldo», detalló.

No obstante, Netanyahu insistió en que Israel tiene el derecho y la obligación de defenderse y afirmó que seguirá con la operación hasta que logre sus objetivos declarados: acabar con la infraestructura de Hamás y detener el lanzamiento de cohetes.

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