El ministerio de Justicia israelí acusó a cinco judíos extremistas con relación a un ataque a la base militar de la Brigada Efraim de Tzáhal en Cisjordania el mes pasado.
El 13 de diciembre, docenas de colonos y sus simpatizantes ingresaron a la base, causaron destrozos, agredieron al personal militar e hirieron a un oficial.
Según el acta de acusación, los cinco ayudaron a planear el ataque con la esperanza de impedir la evacuación de asentamientos ilegales construidos en Cisjordania. Los acusados permanecerán detenidos hasta concluir el proceso.
La agresión sorprendió a los líderes israelíes, que instaron a tomar medidas drásticas contra los judíos radicales.
Asimismo se sospecha que los extremistas provocaron destrozos en otra base militar y atacaron mezquitas palestinas, automóviles y cultivos en territorios palestinos en los dos últimos años.
Se supone que la violencia se desató como represalia por las concesiones del gobierno israelí a los palestinos.