Ante el posible fin de la reciente ola de violencia entre Hamás e Israel, el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, consultó a su más cercano de ministros en Jerusalén. Uno de ellos, Benny Begin, dijo que la escalada había sido contenida, pero que el conflicto estaba lejos de ser resuelto.
«Esta ronda de disparos parece haber terminado y las cosas deben ser miradas en forma sobria, sin ilusiones para ambas partes», manifestó Begin a la radio pública de Israel.
Israel y las organizaciones terrorirtas palestínas parecían detener las hostilidades luego de estar al borde de una nueva guerra en la Franja de Gaza y se dijeron mutuamente a través del mediador Egipto que no dispararían a menos que fueran atacados, tras cinco días de violencia.
La tregua tácita puso fin a una escalada de enfrentamientos, pero ambas partes continúan armadas y listas para continuar la ronda en el conflicto no resuelto que se enconó desde que los islamistas de Hamás tomaron el control de Gaza en 2007.
El primer ministro del Gobierno de Hamás en Gaza, Ismail Haniyeh, elogió a las principales facciones armadas en la franja por aceptar la tregua.
«Demostraron un gran sentido de responsabilidad al decir que respetarían la calma si la ocupación israelí también la observaba», comentó Haniyeh.
Tres terroristas palestinos y cuatro civiles fueron muertos por fuego israelí desde el sábado, mientras que otros 40 resultaron heridos.
Ocho civiles israelíes fueron heridos, dos por algunos de los 115 cohetes disparados desde Gaza y cuatro soldados resultaron heridos, uno de ellos de extrema gravedad, por el misil antitanques que alcanzó su jeep y avivó los enfrentamientos.
Notas relacionadas:
Israel prepara posible operación militar en Gaza
Crece violencia en Gaza: Más de 100 cohetes contra Israel
Condenan escalada de violencia en Gaza y en el sur de Israel