El ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, aseguró que la actual ofensiva militar en la Franja de Gaza podría prolongarse un tiempo que no precisó.

En una visita al sur del país, en una de las baterías antimisiles «Cúpula de Hierro», Barak, que conversó con los soldados, destacó que «las lanzaderas de los cohetes Fajr-3 en poder de las organizaciones terroristas en Gaza fueron prácticamente desmanteladas, pero que esto es sólo el comienzo y que, con todo, el Ejército no puede garantizar un cielo hermético».

«Nos encontramos en medio de una lucha. No está claro si será corta, pero estamos determinados a recuperar la capacidad de disuasión», afirmó Barak, que recorrió la región acompañado por el jefe del Estado Mayor, el teniente general, Benny Gantz y el jefe del Comando Sur del Ejército, el general Tal Russo.

El titular de Defensa hebreo se refirió también a los tres civiles israelíes fallecidos en la ciudad de Kiriat Malaji, ubicada entre las ciudades de Ashdod y Ashkelón, a unos 30 kilómetros al sur de Tel Aviv, al estallar un misiil disparado desde Gaza sobre su vivienda.

«Todos compartimos el dolor de las familias que perdieron a sus seres queridos en Kiriat Malaji», afirmó el ministro.

Un vocero del Comando Civil del Ejército informó que las víctimas de Kiriat Malaji no se encontraban en refugios en el momento de la explosión y volvió a hacer un llamado a la población a que siga las instrucciones recibidas por los responsables de seguridad.

Las organizaciones terroristas palestinas en Gaza lanzaron más de 250 cohetes en esta nueva oleada de violencia que vive la zona, confirmó una portavoz del Ejército israelí.

La Fuerza Aérea israelí, por su parte, realizó alrededor de 150 ataques en Gaza desde el comienzo de la operación, indicó la portavoz militar.

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