El rey de Jordania, Abdullah II, se reunió con el líder de Hamás, Khaled Mashal, a quien manifestó la necesidad de reanudar las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos para llegar a un acuerdo definitivo.
«Las negociaciones entre ambas partes, apoyadas por la comunidad internacional, representan la única forma de restablecer los derechos de los palestinos y lograr la solución de dos Estados», manifestó el monarca, según un comunicado de la Casa Real jordana.
Mashal llegó a Jordania en su primera visita al país tras 12 años, después de que él y otros tres dirigentes de Hamás fueran expulsados de allí en 1999. Durante todo ese tiempo Jordania sólo le permitió realizar dos visitas privadas, una el año pasado para ver a su madre enferma, y otra en 2009 para asistir al sepelio de su padre.
El secretario general de la Oficina Política de Hamás viajó acompañado por el príncipe heredero de Qatar, Tamim bin Hamad al Zani, cuyo país está mediando entre el grupo palestino y Jordania.
Abdullah II también apoyó la reconciliación entre las facciones palestinas, sellada en El Cairo en un reciente acuerdo entre Mashal y el líder de Al Fatah, Mahmud Abbás.
Este acuerdo entre facciones palestinas «fortalece al pueblo palestino y a sus esfuerzos por recuperar sus derechos legítimos», afirmó el rey jordano, en alusión a las reuniones entre israelíes y palestinos que fueron suspendidas la semana pasada en Ammán.
Por su parte, Mashal acusó a Israel de no desear la paz en Oriente Medio y contrastó el respaldo del rey de Jordania al pueblo palestino.
El líder de Hamás deploró la falta de resultados positivos en los recientes contactos auspiciados por Jordania entre la Autoridad Palestina e Israel para retomar las negociaciones directas, y recalcó que el Estado sionista «no desea la paz».
En un rueda de prensa en Ammán, luego del encuentro con el rey, Mashal subrayó que los palestinos no aceptarán ningún programa de asentamientos ni una tierra alternativa.
De acuerdo con el dirigente de Hamás, que vive exiliado en Siria, el encuentro con el monarca confirmó que «cualquier discusión entre Hamás y Jordania abre una nueva página para todas las partes involucradas en el tema palestino».
Anticipándose a una eventual propuesta de Israel de territorios alternativos para no ceder toda Cisjordania y Jerusalén Oriental, Mashal sentenció que «Jordania es para los jordanos, y Palestina, para los palestinos».
Con esa expresión ratificó el reclamo al Gobierno israelí para que reconozca el derecho de retorno de los refugiados palestinos a sus tierras, «pues la mayoría fue forzada a asentarse en Jordania y el Líbano».
El dirigente político, que posee ciudadanía jordana, valoró superada la etapa de enfriamiento de la relación de Ammán con la organización islamista radical que gobierna la Franja de Gaza y hasta hace poco era rival acérrimo de Al Fatah.
Analistas apuntaron que el emirato petrolero intenta convencer a líderes de Hamás a abandonar su sede en Damasco para aislar al gobierno de Bashar al-Assad con el pretexto de que reprime a supuestos luchadores por la libertad.
Noticias relacionadas:
ANP: «Israel propuso transformar barrera en frontera»
Peres: «La paz puede llegar antes de lo que se piensa»
Negociaciones entre israelíes y palestinos finalizan sin logros