En su segundo mandato, el presidente norteamericano, Barack Obama, logró hablar a los israelíes por encima de sus gobernantes. Y lo hizo en un entregado Centro de Convenciones de Jerusalén.
«Atem lo levad», («no están solos») prometió en hebreo ante centenares de universitarios israelíes que no cesaron de ovacionarle. «La seguridad del pueblo judío en Israel es importante porque nunca se puede dar por sentado. Pero no se equivoquen. Aquellos que se adhieran a la ideología de rechazar el derecho de existencia de Israel pueden también rechazar que la tierra está sobre sus pies y el cielo arriba. Israel no se va a ningún lugar. Hoy, les quiero decir, particularmente a los jóvenes, que siempre que exista Estados Unidos de América, 'Atem lo levad'», afirmó.
Obama recordó la ayuda militar estadounidense en el escudo frente a los misiles lanzados por Hamás desde Gaza. «Cuando trato la seguridad de Israel, pienso en niños como Osher Tuito con el que me encontré en Sderot, niños, de la misma edad que mis hijas, que se van a dormir cada noche con miedo a que un misil impacte en su cuarto sólo por el hecho de ser quienes son y vivir donde viven».
«Cuando pienso en la seguridad de Israel, pienso en los cinco israelíes que subieron a un autobús en Bulgaria y al final no volvieron a sus casas debido a Hezbolá. Todos los países deben llamarle lo que es, una organización terrorista», afirmó en alusión al atentado contra turistas en Burgas el pasado verano.
Afirmando que «sólo los israelíes tiene la potestad de decidir sobre su futuro», Obama añadió que para que «siga habiendo un Estado judío y democrático debe haber al lado un Estado palestino».
El líder norteamericano lanzó un mensaje directo a Irán y a su proyecto nuclear. «Irán debe saber que el tiempo no es ilimitado. Dejé clara la posición de Estados Unidos. Irán no debe tener armas nucleares. Esa es una amenaza que no puede ser contenida. Como presidente, aclaré al mundo que todas las opciones están sobre la mesa para conseguir nuestros objetivos. América hará todo lo necesario para evitar que irán tenga armas nucleares».
Tras defender con fervor el ideal sionista, la «vibrante democracia israelí» y la relación del pueblo judío con esta tierra, señaló que «los derechos de autodeterminación y justicia de los palestinos también deben ser reconocidos. Pónganse en sus zapatos y miren al mundo a través de sus ojos. No es justo que un niño palestino no pueda crecer en su propio Estado y viva con la presencia de un Ejército extranjero que controle los movimientos de sus padres cada día. No es justo que la violencia de los habitantes de los asentamientos contra los palestinos no sea castigada o desplazar a familias palestinas de sus casas».
Por último, pidió a los jóvenes que exijan y luchen por la paz asumiendo riesgos. «Israel es el Estado más poderoso en la zona. Israel tiene el inquebrantable apoyo de la nación más poderosa del mundo. Israel tiene la sabiduría de ver el mundo tal como es pero también la valentía de ver el mundo cómo debe ser. Una vez Ben Gurión dijo que en Israel para ser realista hay que creer en milagros».
El discurso del presidente fue interrumpido por un joven a la que la mayoría del auditorio abucheó y al que los guardias de seguridad sacaron de la sala.
Obama se refirió al hecho afirmando que «es parte del debate; está bien», y sonriendo añadió que lo organizaron porque ese tipo de situaciones le hacen sentir «como en casa».
Notas relacionadas:
Obama garantiza apoyo firme a Israel
Obama en hebreo: «¡Qué bueno estar de nuevo en Israel!»
Obama: «Israel y Palestina quieren solucionar conflicto»