El nadador olímpico francés, Fabien Gilot, generó una gran repercusión esta semana en los Juegos Olímpicos de Londres 2012. Pero no porque él y sus compañeros ganaron la medalla de oro para Francia en los relevos de 4x100 en un final dramático con EE.UU.
El diario israelí «Yediot Aharonot» informó que Gilot sorprendió a los televidentes judíos tanto en Israel como en el mundo cuando vieron el tatuaje en su brazo izquierdo escrito en hebreo que decía «Aní Klum Biladeihem» («No soy nada sin ellos»).
Gilot explicó que el tatuaje es un tributo al marido de su abuela, Max Goldschmitdt, un sobreviviente del Holocausto que fue testigo y víctima de los horrores en Auschwitz y que tuvo mucha influencia en el campeón olímpico.
Michel Gilot, padre del nadador, explicó: «Max fue un judío que sobrevivió al Holocausto y a Auschwitz. Nació en Berlin y se mudó a Francia después de la guerra. Para Fabien fue un héroe; lo admiraba y eran muy cercanos. Fue un abuelo en todos los sentidos».
Max falleciió este año pero sabía del tatuaje de Fabien y de sus logros como nadador, según el padre del deportista.
El joven tiene otros tatuajes, incluyendo uno con los anillos olímpicos y otro de tres estrellas que representa a cada uno de sus hermanos.
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