El Partido Popular español, que gobierna actualmente el país, presentó una enmienda en su ley de educación mediante la cual añadió una disposición adicional sobre «Prevención y resolución pacífica de conflictos y valores que sustentan la democracia y los derechos humanos».
Esta modificación incluirá el estudio obligatorio del Holocausto judío y la prevención ante la violencia de género, entre otros.
«En el currículo de las diferentes etapas de la educación básica se tendrá en consideración el aprendizaje de la prevención y resolución pacífica de conflictos en todos los ámbitos de la vida personal, familiar y social, y de los valores que sustentan la democracia y los derechos humanos, que debe incluir en todo caso la prevención de la violencia de género y el estudio del Holocausto judío como hecho histórico», señala la disposición.
La iniciativa aún tiene que ser incorporada al texto de la ley en el trámite parlamentario, sin embargo la mayoría popular en el Congreso hace prever que saldrá adelante.
«Ciertamente supone un progreso», declaró Isaac Querub, presidente de la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE), aunque habría preferido «una enmienda más amplia donde se hiciera referencia a la historia del pueblo judío».
La federación propuso al ministro de Educación del país, José Ignacio Wert, que «se sepa algo más sobre la historia del pueblo judío en vinculación con la tierra de Israel así como de la presencia de los judíos en la historia de España».
Querub insistió en la necesidad de ampliar ese tema en la educación española porque según «sondeos nacionales e internacionales España figura como el país más antisemita de Europa junto a Hungría».
Ello significa que la juventud española tiene una imagen «absolutamente distorsionada, llena de prejuicios y estereotipos con respecto a los judíos», precisó el presidente de la federación.
«Estamos convencidos de que un mayor conocimiento sobre los judíos y sobre su devenir histórico limitará los prejuicios y esperamos que los llegue a desterrar. La ignorancia es lo más atrevido que hay y sólo se puede suplir con conocimiento», agregó.
Por su parte, el presidente de Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra, indicó que es esta reforma se planteó a los distintos gobiernos desde los años '90 para que la educación democrática se asiente sobre «la negación absoluta de la barbarie nazi y genocida y para ser congruente con los planteamientos de derechos humanos que están establecidos en el propio tratado de la Unión Europea».
Además, Ibarra señaló la importancia de incluir esta premisa dentro de la ley de educación por «lo que está sucediendo en Europa».
Concretamente, puso el ejemplo de Hungría, donde fueron exterminados 600.000 judíos y donde ahora hay «diputados de extrema derecha capaces de pedir listas de judíos» o de Grecia, donde surgieron grupos neonazis.
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