Según informaron funcionarios norteamericanos a la cadena ABC, decenas de espías que trabajaban para la CIA fueron capturados recientemente en Irán y el Libano.
Las operaciones de este departamento de inteligencia fueron frenadas, luego de que Hezbolá identificó y capturó varios espías estadounidenses en su país.
El pasado mes de Junio, el jeque Hassan Nasrallah, líder de Hezbolá, se jactó en televisión de haber descubierto, por lo menos, a dos espías de la CIA que se habían infiltrado en las filas de Hezbollah, un grupo que los EE.UU. consideran como terrorista por estar estrechamente ligado a Irán. A pesar de que la Embajada de Estados Unidos en el Líbano negó oficialmente lo hechos, funcionarios norteamericanos admitieron lo sucedido.
De acuerdo con un informe de ABC Noticias, dos redes de espionaje enviadas por la CIA fueron dirigidas a Irán y Hezbollah, las cuales fueron descubiertas por separado, causando un significativo retroceso en los esfuerzos de Estados Unidos para rastrear las actividades nucleares de Irán y las acciones de Hezbollah contra Israel.