Las organizaciones evangélicas del mundo entero constituyen en la actualidad uno de los más importantes grupos defensores de Israel. Su apoyo hacia los judíos es prácticamente incondicional desde los influyentes y crecientes pentecostales de América Latina hasta las denominaciones históricas en EE.UU y Europa.
El apoyo solidario tiene como fundamento un conjunto de valores fundamentales que ambas culturas, evangélicos y judíos, comparten.
En un momento en el que Israel no dispone de grandes amigos en muchas regiones del planeta y en el que muchos sectores de la opinión pública internacional se enfilan contra el pequeño país, los evangélicos reafirman aún más sus lazos con el pueblo judío, calificándolo como hermano mayor al que hay que respetar por voluntad de Dios.
Es una lástima y una torpeza de la política exterior de Israel no valorar este apoyo de los evangélicos. Pocas veces se ha visto a un alto representante de Israel en eventos evangélicos, congresos, seminarios, etc. Más aun, los fondos de cooperación de Israel deben ser reorientados hacia los grupos sociales que apoyan su causa, por ejemplo, periodistas y medios de comunicación evangélicos, que transmiten contenidos pro-Israel. Por muy magnates judíos que presuman ser los Times, Herald, FOX, CBS, TBN, etc, falta mucho por hacer en favor de la causa de Israel.
Los cristianos evangélicos fundamentan su respaldo a Israel en un conjunto de razones que tocan tanto la esfera política, como la moral y la religiosa.
El apoyo al Estado de Israel se sostiene principalmente en interpretaciones bíblicas, como la que se encuentra en el capítulo 12 del libro de Génesis, el cual describe el pacto de Dios con Abraham y las bendiciones que alcanzarán a aquellos que bendigan al pueblo judío. También algunos fragmentos de las cartas del Apóstol Pablo en el Nuevo Testamento (Romanos Cap: 11 y 12) aportan argumentos a favor de la causa.
El Apóstol Pablo describe el judaísmo como la raíz del cristianismo y define la conducta adecuada que debe mantener el pueblo gentil con el judío como una actitud llena de humildad y amor. Estos pasajes, entre otros, conforman el fundamento de la percepción evangélica de los judíos y del judaísmo.
Los evangélicos afirman que Dios le dio la tierra al pueblo de Israel y que los cristianos tienen la obligación bíblica de apoyar a los judíos. Además, también hay quienes encuentran en la solidaridad con el pueblo judío, la expiación del milenio de persecuciones en manos de cristianos.
Por otra parte, para los cristianos evangélicos defender a Israel tiene connotaciones políticas y culturales. Ellos ven al país hebreo como el mejor representante de los valores democráticos en una región que ha estado sujeta a los déspotas regímenes árabes y musulmanes. En pocas palabras, comprenden que al ponerse al lado de Israel, se están poniendo al lado de la paz, la libertad y la ley y en contra del terror y la tiranía.
Particularmente importantes, son los movimientos de apoyo a Israel surgidos en los últimos años en Iglesias Evangélicas de América Latina y Estados Unidos. La relevancia del apoyo de líderes evangélicos radica en la gran cantidad de fieles que reúnen estos movimientos. En Estados Unidos, por ejemplo, los evangélicos constituyen una numerosa colectividad, mientras que los judíos representan apenas el 2%.
Millones de cristianos en todo América, se están uniendo a ellos durante estos momentos. La protección del Estado israelí es imprescindible, además, para que se cumplan las profecías bíblicas.
Mientras tanto, cada años crece más la cantidad de peregrinos evangélicos de diferentes regiones del mundo que visitan Israel. Aman al Estado Hebreo, su historia, sus costumbres y sus lugares. Aman al pueblo judío y su apoyo es, por tanto, incondicional.