La ex violinista israelí, Naomí Elishuv, cuya carrera se vio interrumpida debido a una falla conocida como temblor esencial se sometió a una cirugía de cerebro en el Hospital Ijilov de Tel Aviv para revertir el mal que la aqueja 20 años y por el que abandonó su carrera musical.

«Ahora puedo empezar a vivir otra vez», dijo la violinista.

Pero la operación de Elishuv no fue una intervención cualquiera. La violinista, que tocó en la Orquesta Sinfónica Nacional de Lituania, en la Orquesta de Cámara de Israel y en el Conservatorio de Música de Givatayim, ofreció a médicos, asistentes, enfermeros y personal sanitario, un concierto privado durante la estimulación cerebral previa a la cirugía, informó el diario «Hareetz».

«Mi mayor pasión siempre fue tocar el violín y lamentablemente tuve que conformarme con la enseñanza. Mi temblor me impidió tocar profesionalmente, y esto fue muy duro para una mujer como yo», declaró Elishuv antes de entrar al quirófano.

La ex violinista fue sometida a una intervención quirúrgica por los facultativos Itzjak Fried, director del área de Neurocirugía Funcional del hospital, e Ido Strauss, para una estimulación cerebral profunda (DBS), una cirugía para suprimir los síntomas del temblor.

Fried, responsable directo de la operación, explicó el procedimiento: «Implantamos un marcapasos con electrodos que emite impulsos para suprimir el temblor que interfería en las actividades cotidianas de Naomí», señaló.

«La operación fue realizada bajo efectos de anestesia local. Con el objetivo de colocar los electrodos en el lugar exacto, queríamos que ella participara activamente y en tiempo real, por eso le pedimos que toque el violín durante la cirugía», destacó el especialista.

Además, agregó que la paciente «no sintió dolor» ya que las áreas del cerebro en cuestión no sienten dolor.

«No puedo esperar a lograr una vida normal. Quiero tocar mi violín, firmar un papel y tomar un té sin derramarlo», agregó Elishuv.

La intervención fue grabada en vídeo y en él se aprecia el momento en que Naomi comenta emocionada que vuelve a sentirse dueña del movimiento de sus manos.

El vídeo fue publicado en YouTube y ya alcanzó más de 200 mil reproducciones.

«Estoy muy satisfecho de que tuvimos la oportunidad de disfrutar de un concierto privado de alguien muy talentosa y respetable como Naomí», añadió Fried.