El primer ministro de Egipto, Hisham Kandil, prometió una «dura respuesta» al ataque ejecutado el domingo contra una base militar egipcia en el Sinaí en el que murieron 16 soldados y el posterior intento de infiltración en la frontera israelí.
Asimismo, el jefe de Estado egipcio se comprometió a trabajar junto al Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas para lograr «retribución por la sangre de los mártires», según informó el diario local «Al Ahram». Horas antes, el Ejecutivo había emitido un comunicado para expresar sus condolencias a las familias de los fallecidos, mientras que el presidente, Mohamed Mursi, anunció tres días de luto nacional.
El ataque contra la base fue ejecutado «por elementos yihadistas que se infiltraron desde la Franja de Gaza a través de túneles», según afirmó un responsable del aparato de seguridad egipcio citado por la agencia oficial de noticias egipcia, MENA.
En el atentado, el grupo yihadista se hizo con el control de dos vehículos blindados con los que embistieron contra la valla de la frontera para penetrar en territorio israelí. El Ejército hebreo respondió de inmediato al ataque y nada más cruzar la frontera se produjo un tiroteo. La aviación actuó con rapidez y el segundo blindado fue bombardeado.
Durante el suceso, las fuerzas de seguridad israelíes ordenaron a los residentes en el Consejo Regional Eshkol - cerca de la frontera con Egipto y la Franja de Gaza - que permanecieran en sus casas ante el peligro de que los asaltantes intentaran llevar a cabo un secuestro.
A pesar de que el Ejército egipcio, que sigue ostentando un gran poder, llamó «infieles» a los yihadistas que ejecutaron el ataque, los Hermanos Musulmanes afirmaron que el atentado «puede ser atribuido al Mossad israelí». El objetivo, según afirma el grupo en su página web, es boicotear el mandato de Mohamed Mursi, candidato de los Hermanos Musulmanes recientemente elegido presidente de Egipto.
Sin embargo, el Gobierno israelí desmentió que tenga relación alguna con el ataque y subrayó que "«ncluso la persona que dice esto, cuando se mira a sí mismo en el espejo no se cree el sinsentido que está diciendo».
Hasta el momento, ningún grupo se acreditó la autoría del ataque, aunque la Fiscalía Militar egipcia ya lanzó una investigación para desvelar quiénes fueron los responsables del mismo.
Miembros de la fiscalía acudieron al hospital Al Arish, en el Sinaí, donde se encuentran ingresados los soldados heridos, para escuchar sus testimonios acerca de lo ocurrido.
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