Estimular al cerebro a usar corrientes magnéticas puede reducir significativamente las ganas de los fumadores de prender un cigarrillo, descubrieron investigadores.
Durante el estudio, llevado a cabo en Israel, se desarrolló un dispositivo con forma de casco especial para estimular profundamente partes específicas del cerebro. El equipo envía corrientes magnéticas al cerebro que estimula el sistema nervioso mientras los pacientes están totalmente conscientes.
La investigación fue liderada por el profesor Abraham Zangen, jefe del Laboratorio de Cerebro y Conducta del departamento de Ciencias Humanas de la Universidad de Ben Gurión, junto con el doctor Limor Dinur Klein de la Universidad de Tel Aviv y el profesor Moshé Kotler, jefe de la Unión Psiquiátrica de Israel.
«Este es sólo un análisis interino, pero es prometedor. El 40% de los sujetos de este subgrupo dejó de fumar y seguiremos la investigación en un futuro cercano», manifestó Zangen.
En su opinión, la combinación de una estimulación a alta frecuencia y una señal representativa - que provee una indicación que recuerda a la persona algo que provoca el circuito del deseo en el cerebro - causa una reducción significativa en el consumo del cigarrillo.
Los participantes del estudio fumaron al menos 20 cigarros por día y ya intentaron dejar de fumar en el pasado usando otros métodos. Fueron invitados para 13 sesiones de 15 minutos cada uno, por un período de tres semanas.
«Decidimos llevar a cabo la investigación debido a que la adicción es un gran problema de salud. He estado estudiando los mecanismos básicos de la adicción en animales por diez años e identifiqué alteraciones neuroquímicas en regiones cerebrales específicas asociadas con el desarrollo de la adicción. Además encontramos que la estimulación eléctrica para la adicción de la cocaína en regiones específicas en animales puede reducir la búsqueda de consumir drogas y la conducta adictiva», expresó.
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