El gigante alemán, protagonista del régimen nazi y del holocausto judío, reubicaría su producción en países con bajos costos de energía, pero su ética aún es cuestionada.
Mientras los turcos emigran hacia Alemania en busca de mejores condiciones de vida, las empresas alemanas seguirían la ruta inversa.
Después de 148 años de vida agitada (fue fundada en Barmen, Alemania, en 1863), la Bayer abandonaría su país natal. La noticia, que sacudiera a los mercados y la vida laboral y política de Alemania y el mundo, fue anunciada por Marujn Dekker, presidente del grupo Bayer, el 29 de agosto de 2011, según reporta el periódico The Guardian (RU).
¿El motivo? La decisión del gobierno alemán de abandonar la energía nuclear después de la catástrofe de Fukushima en Japón; hecho que además, aceleraría la decisión de las compañías más grandes de Alemania de relocalizarse en países que ofrezcan energía más barata.
Marujn Dekker, afirmó que, “Es importante que permanezcamos competitivos con otro países. De otra manera una compañía global como Bayer tendría que reconsiderar la reubicación de su producción en países con costos de energía menores”.
El paquete de leyes de energía promulgado por el gobierno, contempla el cierre de todas las instalaciones nucleares del país hasta 2022. Los analistas dicen que la medida impactará con fuerza a las compañías eléctricas y contribuirán a un aumento del precio de la electricidad, dado que la energía eléctrica generada por energía nuclear es más barata que el resto de la canasta de energías.
Dekkers le dijo a la revista de negocios WirtshcaftsWoche que los costos de la electricidad de Alemania eran ya los más altos en la Unión Europea, haciendo al país nada atractivo para la industria química.
Sin embargo, según un estudio de ANAE (Asociación Nacional de de Ahorro y Eficiencia Energética, España) da cuenta que Alemania ocupa el 12° lugar en cuanto a precio de la energía eléctrica industrial (9,21 euros / kWh), donde Chipre, Eslovenia, Irlanda y España son los más caros.
Otro dato interesante del mismo estudio, nos muestra el esfuerzo de los industriales de cada país para acceder a la energía eléctrica. En este caso, Alemania marcha 7mo pero con signo negativo, es decir es el 7mo país que menos esfuerzo hacen los industriales para pagar el precio de la energía que consumen; en números esto es -15,6%; o sea les supone un esfuerzo del 15,6% menos que a la media europea.
Lo que Dekkers tampoco dice es que en Alemania es el Estado quien paga los costos derivados de los residuos directos de la energía nuclear (barras de combustible gastadas), materiales contaminados en las plantas de energía y por la extracción del plutonio y uranio y por los costos de almacenaje de estos residuos.
¿Cuál es la queja de la Bayer, entonces?
Plantas nucleares game over
Sin embargo, la historia del cierre de las Plantas Nucleares es más antigua. En 2000 el gobierno alemán, formado por el SPD y la alianza '90/los verdes, anunció oficialmente sus intenciones de abandonar la energía nuclear. Entonces, se había alcanzado un acuerdo con las compañías de energía para el cierre gradual de los 19 reactores nucleares que posee el país, y el cese del uso civil de la energía nuclear para el año 2020. Basado en los cálculos de 32 años del tiempo habitual de operación de los reactores, el acuerdo estipula de forma precisa cuánta energía se permite generar a una planta antes de su cierre.
Dos reactores fueron cerrados entre noviembre de 2003 y mayo de 2005. En septiembre de 2010, el gobierno alemán ya encabezado por Merkel, puso en práctica el acuerdo alcanzado 8 meses antes con las compañías eléctricas por el que se revocaba el acuerdo de 2002 -del gobierno socialdemócrata y verdes- de cierre de las 17 centrales nucleares en 2020. El 18 de septiembre una masiva manifestación popular antinuclear -cien mil personas rodearon el barrio gubernamental de Berlín- protestaron contra esa decisión.
El 14 de marzo de 2011, 3 días después del accidente de Fukushima en Japón, la canciller Merkel congeló durante 3 meses la decisión adoptada el 6 de septiembre. El 15 de marzo de 2011 decretó el cierre provisional por 3 meses de las 7 centrales nucleares más antiguas. En ese momento el 71% de la población estaba a favor del abandono de la energía nuclear.
El 30 de junio de 2011, a propuesta del gobierno conservador de Merkel, el Bundestag (parlamento alemán) aprobó por amplia mayoría el abandono total de la energía nuclear a más tardar en 2022.
La coalición que encabeza Merkel, ahora pretende cerrar en forma permanente, 8 de las 17 centrales nucleares más antiguas. Siete fueron cerradas temporalmente en marzo, justo después del terremoto y tsunami de Fukushima y otros seis quedarán fuera de juego para el año 2021, explicó el ministro de Ambiente Norbert Roettgen. Los otros tres reactores, más recientes, permanecerán abiertos hasta el año 2022 como un colchón de seguridad para asegurar el flujo constante de suministro de energía.
"Es definitivo; la última de las tres plantas de energía nuclear será cerrada en 2022", dijo Roettgen después de la reunión. "No habrá ninguna cláusula de revisión."
¿Quo vadis, Bayer?
Con las medidas anunciadas, Bayer, no solo se planteó la relocalización de su complejo industrial, sino también la reducción de 4500 puestos de trabajo en todo el mundo, que incluye 1700 en Alemania.
Por lo apuntado más arriba, el cierre de las plantas nucleares pareciera ser la excusa perfecta para una decisión tomada tiempo atrás, antes inclusive que el terremoto y tsunami en Japón, dado que la compañía ya estaba invirtiendo en los mercados emergentes. “En total, crearemos unos 2500 puestos de trabajo nuevos en países como Brasil, India, Rusia, o China”, confirmó Dekkers a 'WirthschaftsWoche'.
Sin embargo, en 2002, ante el anuncio del gobierno de entonces de cerrar las plantas nucleares, los fabricantes de la aspirina 'Bayer' no se habían planteado ninguna relocalización, ¿por qué ahora sí?
Reparemos que Bayer planea asentarse en países donde el marco regulatorio para las pruebas clínicas de fármacos nuevos, es más flexible que en Alemania o EEUU, amén de contar con cientos de miles de voluntarios que participan de las distintas fases de pruebas. Por otra parte, se trata de mercados importantes con millones de consumidores de remedios, siempre que sus precios sean accesibles, aunque no cuenten con sistemas de salud pública y privada, robustos.
Mientras tanto, la salud financiera de la empresa comercializadora de la 'bayaspirina' y famosa por mercadear la heroína como un expectorante "que puede usar hasta un niño", goza de excelente salud financiera.
Veamos estos datos extraídos del sitio web de Bayer:
Personal
A diciembre de 2010, el grupo Bayer tenìa 11.400 empleados en todo el mundo. En Alemania teníamos 36.200 empleados quienes representaban el 32,5% del personal del grupo.
Las dudas sobre los planes de Bayer aumentan cuando se analizan algunas perlas que muestran, en unos casos cómo proceden los gigantes de la farmacología; en otros, echan luz acerca de las conductas de los consumidores de remedios, conductas alienadas y dirigidas por el marketing farmacéutico, y otros más, dan cuenta de las conductas de los investigadores.
En los últimos meses, varias informaciones circularon alrededor de estos temas. Sin embargo, todas tienen algo en común: se trata de métodos de marketing para embellecer a la ciencia y mostrarla deslumbrante ante los ojos de los públicos masivos.
LAS TETAS DE LA CIENCIA
1) Las píldoras de vitaminas puede llevar a tomar riesgos para la salud
Parece que mucha gente, cuando toma vitaminas, se siente Popeye o Superman. Digamos, poco menos que eso. Pruebas clínicas han demostrado que las personas que piensan que han hecho algo saludable, incluso si no es así, si son fumadores, fuman más y y si no, igual creen que son invulnerables a las enfermedades.
Así lo demostraron los "estudios de la percepción del riesgo". Los científicos describen estas conductas como "efecto de las permisiones" y parece que es más notorio cuando, por ejemplo, se toma una píldora de vitaminas. Quienes las toman piensan que han hecho algo sano y saludable, y que por ello pueden comer más papas fritas y/o fumar un cigarrillo más.
Los investigadores tomaron 74 estudiantes que eran fumadores diarios, y los dividieron en dos grupos al azar. Al primer grupo se les dio un placebo y se les dijo exactamente eso, que el grupo estaba tomando un placebo sin ningún ingrediente activo. A los otros participantes se les dijo que les habían suministrado una píldora de vitaminas.
De hecho, los investigadores habían mentido. Todos en el estudio, tuvieron la misma píldora placebo, sin ningún ingrediente activo. Tras ingerir las pastillas, se les dio una encuesta para llenar con la aclaración que les tomaría una hora completarla y que estaba permitido fumar.
Los resultados fueron sorprendentes. En primer lugar, gente que pensaba que había tomado una píldora de vitaminas dieron respuestas tales como "problemas especiales, contraer una enfermedad o una enfermedad, no es probable que me suceda" o "soy poco propenso a sufrir lesiones en un accidente", y así sucesivamente. Un alto porcentaje de este grupo se autocalificaron como más invulnerables a las enfermedades.
Posteriormente, el estudio fue ampliado hacia distintos sectores sociales y etarios y los resultados fueron exactamente los mismos. Tanto se nos ha dicho que las vitaminas son buenas para la salud, que acabamos creyendo con fé y devoción en los efectos positivos de las vitaminas y nos permitimos ingestas que dañan nuestra salud aunque estemos convencidos que "no me hace nada porque tomo vitaminas".
No está de más recordar que 'Cochrane reviews' (http://www2.cochrane.org/reviews/) publicó un estudio acerca de los antioxidantes que se titula "Suplementos antioxidantes para prevención de mortalidad en pacientes saludables y pacientes con enfermedades". Recordemos que las pastillas antioxidantes están recomendadas en la mayoría de las revistas de moda y hasta en revistas deportivas. Sin embargo, los resultados obtenidos por los investigadores, sobre un universo de 200.000 (sí, doscientos mil) pacientes reveló que no solo no prolongan la vida, sino que pueden ser causa de mortalidad prematura.
Transcribo las conclusiones abreviadas pero textuales de los autores: "No se encontraron pruebas para apoyar los suplementos antioxidantes, sea para la prevención primaria o secundaria. La vitamina A, beta-caroteno y la vitamina E (que contienen los antioxidantes) pueden aumentar la mortalidad. Los ensayos aleatorios futuros podrían evaluar los efectos potenciales de la vitamina C y el selenio para la prevención primaria y secundaria. Los ensayos deberían ser estrechamente monitorizados para detectar posibles efectos nocivos. Los suplementos antioxidantes deben ser considerados productos medicinales y se deben evaluar de forma suficiente antes de su comercialización".[1]
(http://onlinelibrary.wiley.com/doi/10.1002/14651858.CD007176/abstract
En otras palabras, todo remedio que ingerimos, puede tener efectos colaterales indeseados e insospechados. Como un amor de carnaval.
2) Los investigadores pueden distorsionar los resultados de sus ensayos.
Antes que insultes gratuitamente (o no tan gratuitamente) a los investigadores, aclaremos que hay quienes mienten deliberadamente (como fue el caso mundialmente famoso del dr. Dr. Hwang Woo-Suk, el primero en clonar un animal. Después confesó haber manipulado los datos y fue preso. Igualito hoy sigue investigando). Pero no todos son El Dr. Woo Suk. Hay otros que lo hacen en aras de mostrar que la ciencia tiene tetas. Y lindas tetas.
Es lo sucede cuando se evita informar un resultado negativo al lado de los datos positivos encontrados.
El principio es simple: en los estudios de referencia grandes y caros, es más difícil ocultar la basurita debajo de la alfombra; pero no sucede lo mismo en los estudios pequeños: allí los datos o resultados negativos pueden desaparecer más fácilmente. Así, en algunos estudios pequeños, los resultados negativos son 'desaparecidos en acción'.
Todo un campo de investigación puede ser distorsionado por una forma de exageración: los resultados positivos de una investigación, que, al tiempo que nos sonríen, parecieran decirnos: "¿No ves que bella soy? ¿No ves lo magnífica que puedo resultar para vos?".
La pregunta es: ¿son estas distorsiones inconscientes y entonces honestas? Porque lo grave es que estos resultados son socializados y algunos, por pequeños que sean, constituyen estudios de referencia para otros estudios y llegan a estudiantes e incluso al público. La ciencia solo tiene las tetas de los travestis…
3) Una práctica eficaz puede ser ineficaz
David Sackett es un referente en las facultades de medicina de todo el mundo. ¿Qué descubrió el hombre? Nada, simplemente suele ser mencionado como el "padre de la medicina basada en la evidencia". ¿Y? Bien, parece que el susodicho pronunció una de esas frases matadoras, que te dan vuelta la cabeza aunque no estudies medicina. Dijo una vez: "La mitad de lo que usted aprenderá en la facultad de medicina, se mostrará como totalmente equivocado o habrá vencido su fecha después de los cinco años de su graduación. El problema es que nadie puede decirle cuál es la mitad que estará totalmente equivocada. Por ello lo más importante a aprender, es cómo aprender por su cuenta".
Algo de esto demostró Vinay Prasad, residente de medicina interna en Northwestern, al publicar una pieza de investigación acerca de las investigaciones médicas. Sobre 212 artículos académicos publicados en la revista New England Journal of Medicine en 2009, comprobó que 124 contenían algún tipo de cuestionamiento acerca de si un tratamiento funciona o no.
"¡Ahhhh!, ¡qué poco interesante!", pensará Ud., "hipócrita lector hermano mío" (Baudelaire dixit). Fíjese que tal vez sea de su incumbencia. Sucede que 73 de los estudios se centraron en los nuevos tratamientos, por lo que no había posibilidad de contrastación en el tiempo.
Sin embargo, los restantes 51 fueron muy interesantes: 16 confirmaron prácticas médicas como "actualmente beneficiosas"; 19 no fueron concluyentes (digamos que empatan el partido) y, lo más importante, 16 encontraron que una práctica que se cree eficaz, de hecho es, por el contrario, ineficaz, o viceversa.
¿Sorprendente? En absoluto, menos si recordamos la cita de David Sackett. Y menos aún si tenemos en cuenta que en 2005, John Ioannidis reunió, de tres revistas médicas importantes entre 1990 y 2003, los 49 estudios que se han citado más de 1.000 veces en posteriores trabajos académicos, digamos "los clásicos".
Quiso saber si aquellas investigaciones y sus resultados habían superado "la prueba del tiempo" de David Sackett -tal como sucediera con la música de Los Beatles- y para ello realizó una búsqueda sistemática en la literatura médica.
De los 49 "clásicos", encontró que en 45 la intervención fue efectiva, pero en el tiempo que había pasado, sólo la mitad de estos hallazgos se habían replicado de manera positiva. Siete estudios, un 16%, se contradice de plano con la investigación posterior, y en otros siete estudios, encontró que los beneficios identificados originalmente, eran mucho más modestos de lo previsto.
Por lo mismo vale la pena tener cuidado con los nuevos hallazgos espectaculares; si titilan como las luces de los carteles de una gran avenida, es posible que omitan alguna refutación o escondan datos negativos; porque de lo contrario, la investigación no tendría esas tetas espectaculares que muchos científicos desean que tengan y que incluso muchas veces, más que siliconas son puro sostén (corpiño, ¿vió?).
4) Marketing farmacológico disfrazado de ensayo clínico
Los ensayos clínicos no siempre se realizan para experimentar una droga nueva, sino para sembrar la droga en el mercado.
Es que no siempre las investigaciones se rigen por los protocolos establecidos por la bioética. Excepto, aunque tampoco es regla, el del consentimiento informado. Es lo que ha sucedido, por ejemplo, con el estudio del Neurotin, de acuerdo con la revista 'Archives of Internal Medicine'.
Un grupo de científicos[2] analizaron todos los documentos relativos al estudio de ensayo clínico del Neurontin, lanzado por la farmacéutica Pfizer (EEUU): la valoración de los efectos, el perfil de seguridad (STEPS) producidos durante la comercialización de Neurontin, las prácticas comerciales y los litigios acerca de responsabilidad sobre el producto, incluida la correspondencia interna y externa de la compañía , informes y presentaciones, así como las deposiciones suscitadas en el proceso legal de Harden Manufacturing vs Pfizer.
Los resultados de esta investigación demostraron se trató de un típico ensayo de 'siembra de mercado' que se hace pasar por un estudio científico legítimo. Los documentos describen el ensayo en sí, pero no sus resultados, una táctica de marketing planificada por el departamento de comercialización de la empresa.
Estos documentos demuestran que al menos dos fuentes externas pusieron en duda la validez del estudio antes de su ejecución y que la calidad de los datos durante el estudio, se vio comprometida a menudo. Muestran asimismo, que en los análisis de la empresa, se examina el impacto de participación en los ensayos clínicos, así como las tasas y dosis de gabapentina prescriptas por los 'investigadores', y que juzgan como "resultados positivos".
En síntesis: se trató de una estrategia de marketin farmacológico disfrazado de estudio clínico que se utilizó para promover la gabapentina y aumentar su prescripción entre los investigadores, donde el Dpto. de Comercialización había participado ampliamente en su planificación y ejecución.
¿Cómo se procede en estos casos? En lugar de contratar a un montón de pacientes a través de unos pocos centros e investigadores, la empresa optó por la inversa: un montón de "investigadores" con pocos pacientes a su cargo. ¿Por qué? Porque lo que se busca es "sembrar" una droga mediante la prescripción masiva, no realizar un ensayo clínico, el cual, directamente, se omite. Y para ello es necesario muchos prescriptores de drogas en tantos sitios como sea posible. Luego se envían las "cartas de reclutamiento". En el caso del Neurotin se enviaron 5000 (cinco mil) cartas a médicos, invitándolos a ser investigadores en las pruebas. 1500 asistieron a una reunión informativa, con información de los estudios (que eran solo de laboratorio) y el material promocional de la droga. A los médicos que participaban como "investigadores", sólo se les permitió contratar a unos pocos pacientes cada uno, (cuatro en promedio) en cada sitio, todo ello bajo la estricta supervisión de los agentes de ventas de la compañía.
Frecuentemente existen sospechas sobre "la siembra" de los ensayos, pero suele ser difícil de probar.
En países como Rusia, China, India, donde Bayer planificó importantes inversiones, nada de esto es ilegal. Pero no es ético y conlleva graves consecuencias en el consentimiento informado. Los pacientes aceptaron participar, creyendo que este ensayo era sobre los riesgos y beneficios de la droga. De hecho, fue un estudio de los beneficios de la comercialización de un ensayo de siembra.
Más grave aún, es que la gabapentina no parece ser una droga saludable como la espinaca: de los 2.759 pacientes, 11 murieron, 73 presentaron efectos secundarios graves y 997 tenían efectos secundarios. La gabapentina no mata, pero fabricar un remedio es algo más serio que ofrecer un nuevo platillo en un restaurante para degustación de los clientes.
Estas son las formas de ponerle tetas de siliconas a la ciencia, a los efectos de hacerla atractiva frente al público masivo.
AMARANTO PARA TODOS
El amaranto es un cereal de origen andino que, a pesar de sus nutrientes y maravillosas propiedades, casi desapareció y hoy, ha vuelto a recuperarse.
El grano de amaranto, al igual que la quinua, es considerado como un pseudo-cereal, ya que tiene propiedades similares a las de los cereales pero botánicamente no lo es, aunque suele ser clasificado dentro de este grupo.
Su cultivo en América se remonta a más de siete mil años. Algunos historiadores afirman que los Mayas serían los primeros en cultivarlo y que luego poco a poco lo fueron haciendo Aztecas y Aymaras. Otros, citan su origen en los ayllus aymaras.
Considerado como una de las plantas sagradas por los pueblos indígenas de América –junto a la quinua, la coca y el maíz- su cultivo fue prohibido por los españoles. Sucede que todo alimento que no estuviese mencionado en la Biblia, no era considerado idóneo.
Aunque persiste algo de confusión sobre su exacta taxonomía, existen alrededor de 60 especies. Varias de ellas se cultivan como verduras, cereales o plantas ornamentales.
El amaranto es muy resistente a los climas fríos y secos, y posee la virtud, además, de crecer incluso en suelos pobres y húmedos en zonas muy tropicales y con lluvias muy frecuentes, de, aproximadamente 980mm.
Hoy el amaranto se produce en México, Perú y Bolivia, pero también en China e India
Propiedades del amaranto
• Del amaranto se aprovecha todo: el grano y la planta en sí, tanto como verdura cuanto como forraje para los animales.
• La semilla tiene un alto contenido de proteínas, vitaminas y minerales.
• Es ideal en anemias y desnutrición ya que es un alimento rico en hierro, proteínas, vitaminas y minerales.
• Es un alimento que contiene altos niveles de calcio y magnesio.
• Se puede aprovechar en la elaboración de cosméticos, colorantes e incluso plásticos biodegradables.
• Tanto las hojas como las semillas son de un alto valor nutritivo.
• Las hojas tienen más hierro que las espinacas. Contienen mucha fibra, vitamina A y C así como hierro, calcio y magnesio.
• Tiene un alto nivel de proteínas, que va del 15 al 18 % y además, un buen equilibrio a nivel de aminoácidos. Contiene lisina, un aminoácido esencial en la alimentación humana y que no suele encontrarse o se encuentra en poca cantidad, en la mayoría de los cereales.
• Contiene entre un 5 y 8% de grasas saludables. Destaca la presencia de escualeno, un tipo de grasa que hasta ahora se obtenía especialmente de tiburones y ballenas.
El Amaranto fue uno de los alimentos seleccionados por la Nasa para los astronautas enviados al espacio, dado su alto valor nutricional, su escaso peso y la facilidad de asimilación y digestión.
BAYER A LA SOMBRA DE IG FARBEN
¿Tendrá interés la Bayer en asentarse en países donde los marcos regulatorios sobre los ensayos clínicos son flexibles, donde se cuentan de a cientos de miles los voluntarios para probar nuevos remedios, donde existen plantas nucleares y energía barata y, finalmente, donde nadie se dá cuenta que las tetas de la ciencia no son naturales sino pura silicona y todo esto, mientras se patentiza derivados y plantas como el amaranto?
La respuesta, mi amigo, está soplando en el viento… (Bob Dylan dixit)
[1] Goran Bjelakovic1,*, Dimitrinka Nikolova2, Lise Lotte Gluud2, Rosa G Simonetti3, Christian Gluud2,
[2] Samuel D. Krumholz, BA; David S. Egilman, MD, MPH; Joseph S. Ross, MD, MHS. Author Affiliations: Never Again Consulting LLC (Mr Krumholz and Dr Egilman) and Department of Community Health, Brown University (Dr Egilman), Providence, Rhode Island; and Section of General Internal Medicine, Department of Medicine, Yale University School of Medicine and Yale–New Haven Hospital Center for Outcomes Research and Evaluation, New Haven, Connecticut (Dr Ross).
Artículo escrito por Abraham Ender
Fuente: http://elpaisdelasamapolas.blogspot.com/