El fútbol no es cuestión de vida o muerte; es mucho más que eso. Tal es la pasión, que la tensión reinante en la zona por los lanzamientos de misiles desde Gaza y los bombardeos israelíes a la franja casi no influyen en los fanáticos que ven el Mundial, y menos aún si su equipo llega a la final.
Es por ello que los niños del kibutz Or Haner, ubicado cerca de Sderot, cerca de Gaza, y en su gran mayoría nietos de inmigrantes argentinos, decidieron expresar su aliento a la selección albiceleste.
Últimamente, los chicos pasan la mayor parte del día en los refugios del kibutz, pero entre estallidos de misiles y proyectiles de mortero, hicieron un espacio para mostrar su amor incondicional por los colores favoritos de sus abuelos.
Como Israel no participa en un Mundial desde México 1970, los niños ya saben que cada cuatro años, sea como sea y pase lo que pase, tienen una cita inquebrantable con la selección argentina.
Desde el refugio de Or Haner, aquí va el aliento para Messi, Masche, Fideo, Pipa, Chiquito y Cía, esperando que alcen la preciada Copa.