Los Rollos del Mar Muerto, el mayor descubrimiento de manuscritos de los tiempos modernos, fueron hallados en cuevas de Qumrán a casi 400m debajo del nivel del mar.
Los Rollos del Mar Muerto, un hallazgo arqueológico fundamental para el cristianismo, son el mayor descubrimiento de manuscritos de los tiempos modernos. Fueron hallados entre 1947 y 1956 en varias cuevas de Qumrán a lo largo de la costa noreste del Mar Muerto.
Esta es una región árida, 21 km al este de Jerusalén y casi 400 metros por debajo del nivel del mar. Los rollos comprenden los restos de entre aproximadamente 870 pergaminos, representados por decenas de miles de fragmentos. Están hechos en su mayoría de pieles de animales, pero también de papiro, y uno de cobre. La mayoría de los textos están escritos en hebreo y arameo, y unos cuantos en griego.
Los rollos aparentan ser la biblioteca de una secta judía, muy probablemente los esenios. Cerca de las cuevas están las ruinas de Qumrán, una aldea excavada a principios de 1950 que muestra conexiones tanto con los esenios como con los rollos.
Los esenios eran escribas judíos y observantes estrictos de la religión. La biblioteca aparenta haber sido escondida en cavernas alrededor del comienzo de la primera rebelión de los judíos (66-70 A.D.), mientras que el ejército romano avanzaba contra ellos. Los rollos se dividen en dos categorías: bíblicos y no bíblicos. Han sido descubiertos fragmentos de cada libro de la Biblia, excepto el de Ester. Ya fueron identificados 19 fragmentos de Isaías, 25 de Deuteronomio y 30 de los Salmos.
El virtualmente intacto "Rollo de Isaías", el cual contiene algunas de las más dramáticas profecías mesiánicas, es 1.000 años más antiguo que cualquier otro manuscrito bíblico conocido previamente.
Basados en diferentes métodos de fechado, que incluyen el paleográfico, el escribano y el carbono 14, los rollos fueron escritos aproximadamente en el período entre el 200 a.C. y el 68 d.C. Muchos manuscritos mesiánicos importantes tales como el Salmo 22, Isaías 53, e Isaías 61, datan al menos del 100 a.C. Como tales, los Rollos del Mar Muerto han revolucionado la crítica textual del Antiguo Testamento y de las profecías mesiánicas.
Extraordinariamente, los textos bíblicos de Qumrán concuerdan sustancialmente con diferentes traducciones del Antiguo Testamento que leemos en la actualidad.
Los Rollos del Mar Muerto yacieron intactos, en un ambiente perfectamente árido, por aproximadamente 2.000 años. En 1947, un pastor beduino se tropezó con lo que podría decirse es el descubrimiento arqueológico más importante de la historia. Un año después fue creado el Estado de Israel. El Antiguo Testamento que leemos hoy es sustancialmente el mismo que existía antes del cristianismo. Esto significa que las más de 300 profecías que figuran en la Biblia ya estaban escritas antes de que los autores del Nuevo Testamento entraran siquiera en escena. Los rollos se encuentran expuestos en el Templo del Libro del Museo de Israel en Jerusalén.