El Gobierno israelí aprobó un plan de 500 millones de shékels - alrededor de 139 millones de dólares - para el desarrollo económico del sureño desierto de Negev, según informaron varios medios hebreos.
El plan quinquenal incluye inversiones significativas para construcción de nuevas viviendas, desarrollo de sectores de alta tecnología, mejoras de infraestructuras y fortalecimiento de gobiernos locales.
Beer Sheva, la principal ciudad en el Negev, y comunidades más pequeñas como Dimona, Yeruham, Arad y Ofakim, fueron nominadas como «comunidades piloto» en el proyecto, cuyo propósito es impulsar el desarrollo económico de la región mediante la construcción de tres parques industriales y el otorgamiento de subsidios a los ya existentes.
El plan proporcionará mayores incentivos fiscales a las compañías para que se trasladen al Negev.
Elaborado por la oficina del primer ministro y por el ministerio de Desarrollo del Negev y la Galilea, el emprendimiento complementa la reubicación militar masiva de bases aéreas y terrestres en el sur de Israel durante los próximos años, una acción que, según informó el portavoz del Gobierno, servirá para sacar a la economía regional de décadas de estancamiento.
«El Ejecutivo espera que el plan anunciado impulse la economía del Negev en 1.700 millones de shékels - 470 millones de dólares - para comienzos de 2020», indicó el vocero.
Durante la reunión semanal de su Gabinete, el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, calificó el plan de «histórico» y aseguró que creará empleos y convertirá al Negev en uno de los más importantes centros de alta tecnología.
Por su parte, Silvan Shalom, ministro de Desarrollo del Negev y la Galilea, agregó ministros que busca implementar el plan de forma que familias enteras de los militares en carrera e israelíes de clase media se trasladen a esa región.
Shalom añadió que los funcionarios de su ministerio, junto con las autoridades locales, planea emprender una campaña de relaciones públicas para mejorar la imagen del Negev con el fin de animar a las familias jóvenes a mudarse al área, además de incrementar la oferta de viviendas residenciales, expandir la cultura y la recreación y desarrollar una infraestructura civil para reducir las brechas sociales y económicas entre la comunidades del Negev y las del centro de Israel.
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