El presidente iraní, Mahmud Ahmadinejad, ignoró una advertencia del secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, de evitar una retórica incendiaria y declaró antes de la sesión anual de la Asamblea General que Israel «no tiene raíces en la historia de Oriente Medio y que será eliminado».

Ahmadinejad dijo asimismo que no tomaba en serio la amenaza de que Israel podría lanzar un ataque militar contra las instalaciones nucleares de Irán, negó haber enviado armas a Siria, y se refirió a las amenazas de Teherán contra la vida del autor británico Salman Rushdie.

EE.UU desestimó rápidamente los comentarios del mandatario iraní considerándolos «vergonzosos, ofensivos e indignantes».

«Fundamentalmente, no tomamos seriamente las amenazas de los sionistas. Contamos con todos los medios defensivos a nuestro alcance y estamos listos para defendernos», dijo Ahmadinejad en la ONU.

El secretario general de la organización, Ban Ki Moon, había advertido a Ahmadinejad de los peligros de su retórica inflamada cuando ambos se vieron antes de la reunión anual de los líderes mundiales en la Asamblea General.

Ahmadinejad, quien utilizó sesiones anteriores de la ONU para cuestionar al Holocausto y la versión de EE.UU de los ataques del 11 de septiembre de 2001, no prestó atención a la advertencia y en cambio reiteró su rechazo al derecho de existir de Israel.

«Irán está en su tierra en los últimos 7,000, 10,000 años. Los sionistas están ocupando esos territorios durante los últimos 60 o 70 años con el apoyo y fuerza de Occidente. Ellos no tienen raíces ahí en la historia», comentó.

«Creemos que se encuentran en un callejón sin salida y que buscan nuevas aventuras para escapar de él. Irán no será dañado con bombas extranjeras», declaró Ahmadinejad.

«Ni siquiera los contamos como parte de cualquier ecuación para Irán. Durante una fase histórica, representan alteraciones mínimas en la escena y entonces serán eliminados», añadió.

Ahmadinejad habló también sobre el estado de derecho, y sus comentarios hicieron que el embajador de Israel ante Naciones Unidas, Ron Prosor, abandonara el lugar.

«Ahmadinejad mostró nuevamente que no sólo amenaza el futuro de la gente judía, sino que además busca borrar nuestro pasado», dijo Prosor.

«Tres mil años de historia judía ilustran el claro peligro de ignorar fanáticos como el presidente de Irán, especialmente cuando está más cerca de conseguir armas nucleares», señaló el diplomático israelí.

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