El jefe negociador de la Autoridad Palestina (AP), Saeb Erekat, aclaró que la Liga Árabe reiteró su posición oficial sobre un eventual acuerdo de paz con Israel, que contempla la solución de los dos Estados sobre las fronteras de 1967, pero con intercambios de tierras, por lo que «no se trata de algo nuevo».
«La delegación de la Liga Árabe presentó su posición oficial: tras la inequívoca aceptación por parte de Israel de dos Estados con las fronteras de 1967, el Estado palestino, como país soberano, podría considerar una pequeña modificación de las fronteras», explicó.
Erekat detalló que esta propuesta ya está contemplada en la Iniciativa de Paz que fue ratificada por 57 países árabes y musulmanes en 2002 y que «provee una solución global y regional basada en la implementación israelí del Derecho Internacional a cambio de la plena normalización con el resto de la región».
El jefe negociador recordó que esta propuesta fue rechazada por Israel, lo que «muestra su negación a un plan de paz. En cambio, está completamente comprometido con la construcción de asentamientos en Cisjordania y con la violación a los derechos palestinos y a la estabilidad regional».
Por su parte, Muhammad Ishtayya, miembro del Comité Central de Al Fatah, afirmó que «los propuestos intercambios de territorios con Israel deben resultar de negociaciones y no como pago adelantado».
«Queremos un Estado palestino en las fronteras de 1967 con Jerusalén Oriental como capital y 138 Estados de la ONU votaron a favor de ello», declaró Ishtayya sobre la propuesta avalada por la Liga Arabe.
El funcionario consideró que «Israel tratará de anexarse territorios de Cisjordania en los cuales erigió asentamientos y pronosticó que intentará incluirlos en la Iniciativa de Paz Árabe, lo que resulta inaceptable porque los consideramos ilegales».
«Si cedemos un centímetro, debemos recibir un centímetro a cambio», sentenció.
Las declaraciones de los dirigentes palestinos contrastan con las del Gobierno israelí, que celebró el cambio de postura de la Liga Árabe, al considerar que supone un «estímulo» para el proceso de paz en Oriente Medio.
«La noticia es un muy positiva», dijo la ministra de Justicia, Tzipi Livni, reponsable de las negociaciones. «En el contexto de un mundo tumultuoso, permitirá a los palestinos sentarse a la mesa para realizar los compromisos necesarios y enviará a la opinión pública israelí el mensaje de que no somos sólo nosotros y los palestinos», explicó.
Mientras tanto, el presidente del buró político de Hamás, Khaled Mashal, rechazó de plano la propuesta de la Liga Árabe.
«Cualquier concesión de ese tipo lesionará la causa palestina», subrayó el líder de la organización terrorista palestina que gobierna en la Franja de Gaza.
«Estamos preparados para utilizar todas las opciones disponibles para liberar los territorios palestinos que será nuestra objetivo máximo en los próximos cuatro años», añadió Mashal, que fue reelecto a su cargo el mes pasado.
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