El gobierno de Alemania tiene previsto presentar una nueva legislación con la intención de poner fin a una disputa respecto a la tradición religiosa de la circuncisión.

Berlín adoptó un proyecto de ley que enmarca la circuncisión por motivos religiosos, cuestionada por una sentencia en junio que convertía esta práctica en un acto susceptible de ser perseguido penalmente, indicó el portavoz del gobierno Steffen Seibert en una conferencia de prensa.

Un tribunal de Colonia estimó entonces que la circuncisión suponía «lesiones corporales graves» y que, por tanto, era susceptible de ser perseguida penalmente.

«Este texto prevé que los padres puedan dar su acuerdo a la circuncisión de su hijo si la operación se lleva a cabo en un marco médico profesional», declaró Seibert.

El texto, que aún debe ser adoptado por los diputados, tiene por objetivo «enmendar» la inseguridad jurídica en la que se encontraban las comunidades judía y musulmana, que practican la circuncisión por razones religiosas

Una operación de circuncisión podrá llevarse a cabo si respeta «un tratamiento adaptado y efectivo del dolor».

«Una persona designada por una comunidad religiosa puede, si respeta estas condiciones, proceder a una circuncisión en los seis primeros meses de vida del niño», precisó Seibert.

Esta persona deberá no obstante haber seguido una formación para este tipo de operación y, como un médico, estar calificado.

El texto concierne exclusivamente a los niños, la ablación de las partes genitales de las niñas sigue prohibida en Alemania.

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