El ministro Defensa israelí, Ehud Barak, indicó que su país "por ahora no tiene intenciones de lanzar un ataque militar inminente contra Irán, pero advirtió de que "todas las opciones están abiertas" para impedir el desarrollo de armamento nuclear por parte del Gobierno de Teherán.
"De momento no tenemos intención de pasar a la acción, pero el Estado de Israel se encuentra lejos de estar paralizado por el miedo", declaró Barak a la radio pública israelí. "Se debe actuar con calma, con tranquilidad, no necesitamos guerras de envergadura", prosiguió.
El líder israelí expresó su respeto por las palabras del jefe del Estado Mayor conjunto del Ejército norteamericano, el general Martin Dempsey, quien admitió que existen diferencias entre Israel y Estados Unidos respecto a Irán y se mostró convencido de que la presión diplomática es la forma correcta de actuar en este caso.
"Israel estaría satisfecho si las sanciones y la diplomacia sirvieran para que la dirigencia iraní tomara la decisión clara de abandonar su programa nuclear militar", declaró Barak. "Desgraciadamente, pienso que eso no va a suceder", agregó.
En todo caso, "en última instancia, Israel es una nación soberana y su Gobierno, sus fuerzas armadas, sus servicios de seguridad, y no otros, son los responsables de la defensa, el futuro y la existencia del Estado", manifestó.