El primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, anunció hoy la formación de una unidad especial para lidiar con los colonos judíos extremistas que ataquen a soldados del Ejército.

"Pretendo luchar con toda mi fuerza contra esos actos salvajes", dijo tras una reunión convocada de urgencia con los responsables militares y de los servicios secretos, según un comunicado de su oficina.

Netanyahu solicitó al titular de Defensa, Ehud Barak, que "prepare esta semana un plan de mano dura para hacerse cargo de los agitadores".

"No toleraremos una situación en la que oficiales y soldados del Ejército israelí sean atacados y distraídos de la protección de los ciudadanos ", agregó sobre un hecho "inaceptable" que "cruzó todas las líneas rojas".

El anuncio de creación de la unidad especial llega después de que medio centenar de colonos radicales atacase una base del Ejército israelí en Cisjordania, donde arrojaron piedras, quemaron neumáticos y dañaron vehículos.

El asalto, en el que resultó herido leve un oficial, se produjo aparentemente en respuesta a rumores de que el Ejército israelí tenía intenciones de desmantelar un asentamiento en cumplimiento de un dictamen de la Corte Suprema.

Las fuerzas de seguridad de la base lograron repeler a los jóvenes atacantes, si bien no se ha informado todavía de arrestos.

A las condenas de Netanyahu se sumaron el presidente del Estado, Shimón Peres; la líder de la oposición, Tzipi Livni; y el ministro de Defensa, Ehud Barak, a quien un dirigente de los colonos acusó de incendiar la situación en su empeño de seguir adelante con los planes de demoler el asentamiento Ramat Gilad.

El jefe del Estado Mayor, Beny Gantz, aludió al inimaginable absurdo que supone que los militares tengan que defenderse de quienes defienden de eventuales ataques palestinos, mientras que el responsable de la comandancia de la zona, Avi Mizrahi, dijo nunca haber visto "tanto odio judío" contra sus tropas.