Israel puso en marcha este domingo la liberación de 550 presos palestinos en el marco de la segunda fase del canje de prisioneros a cambio de la puesta en libertad del soldado Gilad Shalit, que fue entregado a las autoridades hebreas el pasado 18 de octubre.
El presidente de Israel, Shimón Peres, firmó los documentos que certifican la libertad de cada uno de los cautivos.
A diferencia de los 450 presos que fueron liberados en la primera fase del acuerdo, entre los que había condenados a cadena perpetua por perpetrar atentados que costaron vidas humanas, ninguno de los actualmente liberados tiene condenas por haber causado víctimas mortales.
La puesta en libertad de los 550 fue autorizada por la Corte Suprema, que rechazó una solicitud planteada por ciudadanos israelíes opuestos a la liberación de estos reos, condenados a penas que oscilan entre varios meses de prisión y 18 años de cárcel.
El Servicio de Prisiones israelí indicó que casi todos los reclusos que serán liberados durante esta noche proceden de Cisjordania, el territorio palestino liderado por el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbás.
Dichos prisioneros palestinos cumplían condenas que incluyen delitos como intento de asesinato, colocación de artefactos explosivos e integración en grupos de milicianos terroristas.