El primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, aseguró este que la «Primavera Árabe», la ola de manifestaciones contra las autoridades en varios páises árabes, es «una revolución islamista cuyo núcleo es hostil» con Israel.

«Oriente Medio está atravesando una revolución islamista cuyo núcleo es hostil con Israel». La «Primavera Árabe», escribió Netanyahu en su cuenta oficial de Twitter.

Netanyahu también cargó contra los palestinos por su postura inmovilista en las negociaciones para alcanzar un acuerdo de paz y dejó claro que Israel no puede ser el único actor que realice concesiones.

«Para la paz, los palestinos tendrá que abandonar su fantasía de disolver Israel y hundirlo hasta dejarlo en un tamaño insostenible», declaró, antes de culpar a los palestinos de no haber alcanzado un acuerdo de paz porque no están dispuestos a hacer las necesarias concesiones. «Las concesiones no pueden venir sólo de nuestra parte», remarcó.

Por último, Netanyahu quizo dejar claro que su Gobierno «no renunciará a las necesidades fundamentales de Israel», por lo que «los palestinos también tendrán que realizar concesiones».

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