El día miércoles, la Knesset celebró una sesión acalorada en vísperas de la inducción del Presidente de Kadima, Shaul Mofaz, como miembro de la Coalición.
Algunos Funcionario, entre ellos, el Diputado Binyamin Ben-Eliezer, del partido Laborista, enunciaron duras críticas a Netanyahu y Mofaz, por haber mantenido en secreto sus planes de formar una coalición.
Como parte del pacto entre Likud y Kadima para evitar las elecciones anticipadas, Shaul Mofaz asumirá el cargo de Ministro sin cartera. Tras la polémica decisión, los principales partidos conformaron una coalición sin precedentes integrada por 92 miembros en la Knesset. Como consecuencia, la oposición, encabezada por Shelly Yachimovich, sufrió un fuerte debilitamiento.