En una entrevista concedida al diario alemán «Bild», el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, acusó al gobierno de Irán de entregar al presidente sirio, Bashar al-Assad, armas y personal para asesinar a su propio pueblo.

«Creo que lo que está pasando en Siria es terrible, una matanza masiva. Hay que entender quién está apoyando esta brutalidad, esta carnicería, y esos son Hezbolá e Irán», dijo Netanyahu.

«Me refiero a apoyando físicamente. Asesinos apoyando a asesinos, dándoles armas y personal para llevar a cabo los asesinatos. A esto nos enfrentamos: Irán, que asesina brutalmente a su pueblo en las calles, y Siria, que perfeccionó la técnica de bombardear a su propia población con artillería», agregó.

Sobre la posible intervención militar internacional en el país árabe, Netanyahu indicó que «es una decisión para los poderes mundiales que hablan de ella. Cuanto menos yo hable de ella como primer ministro de Israel, mejor. Cuanto más hable sobre ella, más daño haré a las personas que quieren ayudar», manifestó.

Por otra parte, el primer ministro hebreo hizo referencia al programa nuclear iraní, del cual aseguró que «no se detuvo ni en un milímetro». Netanyahu, que explicó el funcionamiento de una bomba nuclear, señaló que Irán ya tiene el material necesario para fabricar una, aunque matizó que el proceso de relleno de la bomba es más rápido cuando el uranio está enriquecido a un porcentaje más alto que el que posee Teherán.

«A Irán se le exigió que detenga el enriquecimiento de uranio al 20%. Eso no detiene su programa nuclear de ninguna manera. De hecho le permite continuar con él», concluyó Netanyahu.

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