El Ejército israelí está finalizando los preparativos para la evacuación del barrio de Ulpana en el asentamiento de Bet El, para lo cual el Tribunal Superior de Justicia fijó como fecha límite el 1 de julio.

Frente a esto, las fuerzas de seguridad están anticipando una resistencia significativa y por esa razón no tienen actualmente planes para anunciar la fecha o la hora de la operación.

Estas evaluaciones se llevan a cabo debido a las dificultades que entraña la mudanza de 30 familias y la demolición de cinco edificios de varios pisos. Aún así, el Ejército no tiene planes de comenzar la evacuación antes de que el ministerio de Defensa complete la construcción de viviendas temporales para los evacuados en una base militar cercana.

Algunos miembros ultraderecha ya diseñaron un plan para combatir la evacuación. Los activistas pretenden bloquear la operación mediante el cierre de carreteras y lanzando cócteles molotov y pintura, así como la quema de neumáticos y atrincherarse dentro de las casas.

Mientras tanto, el movimiento juvenil nacionalista-religioso, Bnei Akiva, hizo un llamamiento a sus miembros a tomar las calles y resistir la evacuación de Ulpana. El secretario general del movimiento aseguró que «no podemos permanecer en silencio ante esta injusticia moral y social».

«Salgan a las avenidas y a las calles y hagan que sus voces sean escuchadas», se lee en uno de los mensajes oficiales que la dirección de Bnei Akiva envió a sus miembros con el fin de detener la planeada evacuación.

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