Israel presentó una protesta formal ante la decisión de la Unesco de abrir una cátedra de Astronomía, Astrofísica y Ciencias Espaciales en la Universidad Islámica de Gaza, que considera inadecuada al identificar al centro académico con la organización terrorista Hamás.

Promovida por la secretaria general de la organización, Irina Bokova, la apertura de la cátedra fue posible gracias a la aceptación de Palestina como miembro de pleno derecho número 195 de la Unesco el pasado mes de octubre.

EE.UU e Israel retiraron sus partidas a la institución en respuesta al ingreso de Palestina, al considerar que israelíes y palestinos deben alcanzar un acuerdo de paz antes de que se otorgue pleno reconocimiento a Palestina en foros internacionales.

Fuentes de la cancillería israelí dijeron que el embajador israelí ante la agencia, Nimrod Barkán, elevó en París a representantes de la organización una carta formal de protesta por la nueva decisión.

La cátedra supone un sello de reconocimiento del organismo internacional al centro como institución académica, una medida que enojó a Israel, que aduce que la universidad ha servido durante años como plataforma de apoyo político al terrrorismo de Hamás.

«No nos parece adecuada la decisión de la Unesco de apoyar una universidad respaldada por Hamás en Gaza», manifestó el portavoz adjunto de la cancillería israelí, Lior Ben Dor.

El funcionario de Exteriores se quejó de que el centro académico «es bien conocido por su apoyo a Hamás» y destacó que en sus aulas «los estudiantes de Química o Ingeniería aprenden cómo preparar explosivos y los de Historia cómo odiar a Israel».

En la operación »Plomo Fundido», en el invierno de 2008-2009, la Fuerza Aérea israelí bombardeó una de las alas de la universidad, en la que Israel decía que se encontraban laboratorios para la producción de bombas y proyectiles.

«Nos parece muy extraño que de todas las universidades que operan en los territorios bajo control de la Autoridad Palestina justo se decida respaldar esa en Gaza», refirió el portavoz.

Y se preguntó: «¿Qué mensaje quiere transmitir la Unesco al pueblo palestino? ¿Quiere realmente apoyar a Hamás, una organización terrorista que no quiere reconciliarse ni con el presidente palestino, Mahmud Abbás?».

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