El ex jefe de los servicios de inteligencia interior israelíes, Shin Bet, Yuval Diskin, afirmó que el primer ministro de Israel, Binyamín Netanyahu, es «un líder poco fiable obsesionado con Irán», al tiempo que criticó su manera de tomar las decisiones más importantes del país.

En una entrevista publicada por el diario local, «Yediot Aharonot», Diskin, jefe del Shin Bet de 2005 a 2011, aseguró que las decisiones sobre seguridad más importantes para Israel se toman de un modo «temerario e irreflexivo».

«Netanyahu es asustadizo, voluble y elude la responsabilidad», señaló Diskin y agregó que existe «una crisis de liderazgo y de valores y un total desprecio por los ciudadanos».

El ex responsable de la inteligencia interna en Israel relató los detalles de una importante reunión sobre Irán con la participación de un grupo de ministros del Gobierno, entre ellos Netanyahu, el titular de Defensa, Ehud Barak, y el de Exteriores, Avigdor Liberman, además de jefes de seguridad.

«Netanyahu, Barak y Liberman se encontraban sentados fumando puros frente a todo el mundo. El ministro de Defensa se levantaba, iba hacia una esquina y se servía un pequeño trago cada cierto tiempo. En el medio de una reunión tan delicada y confidencial, Barak se paseaba con una copa en una mano y un cigarro en la otra frente a los oficiales militares y los de inteligencia», destacó.

Según Diskin, otros líderes israelíes con los que trabajó como Rabín, Peres, Sharón o Olmert, «sabían cómo poner el interés nacional por encima de cualquier otra cosa».

A su entender, «la actitud actual de Netanyahu hacia lrán es manipulativa y está ligada a su intención de asegurarse un lugar en la historia».

«Netanyahu quiere pasar a la historia como la persona que hizo algo grande, lo escuché empequeñecer lo que hicieron sus predecesores y aseverar que su misión en Irán es de mucha mayor escala», recalcó.

La oficina de Netanyahu respondió a través de un comunicado a los dichos de Diskin, achacándole intereses personales.

«Las ridículas declaraciones de Diskin - quien hasta hace medio año quería liderar el Mossad con el primer ministro Netanyahu - son infundadas», indicó el comunicado.

«Diskin realizó ahora estas afirmaciones por razones políticas debidas a su propia frustración por no haber sido nombrado jefe del Mossad», agregó el comunicado.

Por su parte el ministerio de Defensa aseguró que las palabras de Diskin «no tienen ninguna base y son recicladas y ofensivas tanto en el contenido como en el tiempo».

«No hay una pizca de verdad en sus declaraciones, no hay ningún fallo en el proceso de decisiones sobre asuntos relacionados con Irán», aseguró el ministerio.

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