El ministro de Defensa israelí, Ehud Barak, comenzó los preparativos para abandonar su cartera subrayando que el Estado judío «se enfrenta a desafíos extremadamente complejos», entre los que destacó a Irán y Siria.

«Irán sigue ahí, Siria se está desintegrando ante nuestros ojos y la transferencia de armas a Hezbolá podría tener lugar en cualquier momento», afirmó Barak durante su última comparecencia ante la Comisión de Exteriores y Defensa del Parlamento.

Pese a ello, el ministro recalcó que «Israel es claramente el Estado más fuerte de Oriente Medio».

«Creemos que no hay ninguna fuerza en el área que podría atacarnos con divisiones y fuerzas armadas como hemos experimentado en las últimas décadas», agregó, según nformó el diario israelí «Haaretz».

Posteriormente, Barak visitó una base aérea en el centro de Israel y revisó los escuadrones de F-16 antes de dirigirse a la base naval de Haifa.

Este martes tendrá lugar la ceremonia oficial de despedida en la base aérea de Palmajim.

Barak inició su actual mandato al frente del ministerio en junio de 2007 y encabezó el mismo durante dos ofensivas contra Hamás en la Franja de Gaza - la operación «Plomo Fundido» en 2009 y la operación «Pilar Defensivo» en 2012 - y durante el bombardeo de una supuesta instalación nuclear en Siria, según informaron medios extranjeros.

El ministro anunció el pasado noviembre que abandonaría el cargo y destacó que planeaba «estudiar, escribir, vivir y disfrutar de su tiempo libre».

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