La policía israelí arrestó a seis palestinos que arrojaron piedras a un grupo de provocadores judíos que subió a la explanada del Monte del Templo, en Jerusalén, durante la fiesta de Pesaj, para rezar y brindar con vino, una acción considerada ofensiva en lugares sagrados musulmanes.

«Los palestinos arrojaron piedras y seis de ellos fueron detenidos por la policía que consiguió con muchos esfuerzos sacar a los provocadores del lugar», informó el portavoz de la policía israelí, Micky Rosenfeld.

«Debido a los disturbios, dos palestinos resultaron heridos. Los afectados, Jamal Kabaja (54) y su hijo Muhamad (18), fueron primeramente tratados en el lugar por equipos de Maguén David Adom y luego trasladados al Centro Médico Shaarei Tzedek de la capital israelí», informó el parte policial.

El Monte del Templo, donde se encuentran el Domo de la Roca y la mezquita de Al Aqsa, es uno de los lugares más sensibles de Jerusalén y escenario de constantes choques entre palestinos y fuerzas israelíes de seguridad.

Además, otras dos personas fueron heridas en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad hebreas en la localidad cisjordana de Nabi Saleh durante una manifestación contra la confiscación de terrenos cerca del asentamiento judío de Halamish.

Los agentes dispersaron la protesta disparando balas de goma y gases lacrimógenos.

Entre los heridos hay un periodista irlandés de la cadena árabe Al Jazeera que recibió el impacto de una bala de goma.

Varias personas que sufrieron problemas respiratorios por inhalación de gases lacrimógenos fueron atendidas en el lugar.

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