Con motivo de Rosh Hashaná - Año Nuevo Judío -, el primer ministro israelí, Binyamín Netanyahu, deseó a todas las comunidades judías del mundo seguridad, prosperidad y, sobre todo, paz.

El líder hebreo destacó algunos de los logros del país de este último año y dijo que «Estoy orgulloso de ser el primer ministro de Israel. Seguimos siendo un oasis de democracia, estabilidad, tolerancia y libertad», afirmó, en comparación con los vecinos de la región.

Netanyahu también aprovechó la oportunidad para pedir más acciones contra Irán y expresó que «se debe frenar el programa nuclear iraní» ya que es la mayor amenaza para Israel y el resto del mundo.

Además trató de calmar los temores de cualquier amenaza potencial al Estado judío cuando afirmó en la última reunión de su Gobierno que «nuestros enemigos tienen muy buenas razones para no probar nuestra fuerza, para no probar nuestro poder. Ellos conocen la razón».

Durante el saludo, Netanyahu mencionó la importancia de los judíos de la diáspora y, además, profundizó sobre algunas cuestiones políticas del día.

El primer ministro concluyó al asegurar que el Estado de Israel «desafió las leyes de la historia contra tremendas adversidades para convertirse en un país próspero, moderno, avanzado y rebosante en un período tan corto de tiempo».

También el presidente israelí, Shimón Peres, expresó sus deseos para el pueblo judío por Rosh Hashaná.

«Disfrutar de seguridad y paz, ser fieles a nuestra tradición y seguir teniendo un papel importante en la evolución increíble en la ciencia y la tecnología. Juntos podemos y debemos hacerlo de modo que este año sea feliz para nosotros, para nuestros amigos, nuestros vecinos y para el resto del mundo», señaló.

Peres recibió una llamada telefónica del presidente de la Autoridad Palestina (AP), Mahmud Abbás, en honor del Año Nuevo judío.

«Me gustaría desearle a usted, a su familia y al pueblo de Israel un Shaná Tová y Jag Sameaj (buen año y felices fiestas), dijo el líder de la AP, según informó la oficina de la presidencia.

Peres agradeció el gesto y deseó a Abbás y al pueblo palestino un feliz año nuevo.

«Ambas partes debemos buscar formas para superar la crisis y llegar a una solución de paz le doy las gracias por el saludo y el deseo de su pueblo de un año de paz y el fin del conflicto», expresó el presidente israelí.



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