El líder de Hezbolá, el jeque Hassan Nasrallah, acusó a la oposición de Siria de querer entregar el país a Estados Unidos e Israel, poco después de aparecer en público con motivo de la festividad chiíta de la Ashura.
"Lo que quieren en Siria no son reformas políticas ni la lucha contra la corrupción, sino un régimen de traición árabe que se entregue a Estados Unidos e Israel", apuntó Nasrallah en una videoconferencia difundida por televisión, minutos después de comparecer ante miles de seguidores en el sur de Beirut.
"Algunas personas quieren destruir Siria y compensar la pérdida en Irak tras el fracaso del proyecto de EE.UU en Oriente Medio", dijo Nasrallah, que apoyó al régimen sirio y las reformas emprendidas en ese país porque sostienen al brazo armado de Hezbolá.
Respecto a la retirada de las tropas estadounidenses de Irak, prevista para antes de fin de año, Nasrallah felicitó al pueblo iraquí por "forzar su salida".
Asimismo, reiteró que la amenaza para el Líbano sigue siendo "el proyecto norteamericano-israelí" y criticó a EE.UU por presentarse como defensor de las libertades en la región después de haber apoyado dictaduras como las que cayeron este año durante la denominada "Primavera árabe".
Poco antes, Nasrallah, protegido por sus guardaespaldas, fue recibido por miles de partidarios en un barrio del sur de Beirut en una aparición fugaz con motivo de la Ashura, que conmemora la muerte violenta del imán Hussein, nieto del profeta Mahoma en el año 680.
Hussein cayó muerto en la batalla de Kárbala (Irak) contra el califa omeya Yazid I, momento que se considera el cisma entre las confesiones sunita y chiíta, las dos principales del islam.
La última vez que el líder de Hezbolá apareció en público fue el en octubre de 2010, cuando plantó un árbol frente a su antigua casa de Beirut, bombardeada en 2006 por Israel.
Previamente, en julio de 2008, dio la bienvenida en público a cinco libaneses liberados por Israel en un canje de prisioneros y cadáveres.
Desde entonces, Nasrallah, cuya residencia oficial se desconoce, ha protagonizado numerosos discursos que han sido retransmitidos en diferido a través de pantallas gigantes.