El primer ministro israelí Benjamín Netanyahu decidió por ahora el procedimiento parlamentario que analiza la aprobación de las propuestas de ley presentadas por miembros del partido Likud, con el objetivo de limitar los donativos de gobiernos extranjeros a las organizaciones pro Derechos humanos en Israel.
Según fuentes parlamentarias, Netanyahu ha pospuesto indefinidamente las propuestas presentadas ante el Comité Ministerial para la votación, lo que significa que los miembros del Parlamento israelí no podrán ratificar estas peticiones.
Los proyectos de ley fueron presentados por dos miembros del partido Likud, los diputados Tzipi Hotovely y Ofir Akunis, quienes proponían limitar la contribución de países extranjeros a las ONG israelíes hasta los 20.000 shekels (unos 5.362 dólares aproximadamente).
Según afirman varias personas responsables cercanas al proceso parlamentario, la decisión de Netanyahu responde a las críticas de representantes extranjeros y del Fiscal general, así como también a la petición de la Unión Europea y Estados Unidos.