Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron el viernes la desaparición de tres adolescentes israelíes el jueves por la noche en Cisjordania, bajo sospecha de que se trata de un secuestro realizado por un grupo palestino.
«No damos detalles que podrían dificultar la investigación», dijo el portavoz de las FDI, el general de brigada Moti Almoz, que se limitó a indicar que se lanzó una amplia búsqueda.
Según los medios de locales, un grupo palestino podría haber secuestrado a tres jóvenes estudiantes del seminario rabínico de Kfar Etzión, uno de ellos de nacionalidad norteamericana. La embajada de Estados Unidos está al corriente, precisó la radio pública.
Los jóvenes desaparecieron el jueves por la noche cuando hacían auto-stop cerca de Gush Etzión, un bloque de asentamientos judíos, para dirigirse a Jerusalén.
«Israel hace responsable a la Autoridad Palestina (AP) de la vida de los tres jóvenes israelíes desaparecidos», dijo el primer ministro, Binyamín Netanyahu, quien organizó una reunión de consultas con su ministro de Defensa, Moshé Yaalón, el jefe del Estado Mayor, Benny Gantz y los responsables del Shin Bet.
Además, Netanyahu habló por teléfono con el secretario de Estado norteamericano John Kerry.
«Lo que está ocurriendo en el terreno desde que Hamás se unió al Gobierno palestino es destructivo. Es el resultado de la entrada en el Ejecutivo de una organización terrorista», apuntó.
El primer ministro llamó también a las familias de los adolescentes para asegurarles que Israel «efectúa cuanto está a su alcance para localizarlos».
Por su parte, Kerry conversó con el presidente de la AP, Mahmud Abbás, y solicitó su ayuda para encontrar a los desaparecidos en Cisjordania.
Las FDI encontraron durante la búsqueda un vehículo incendiado con placa israelí y el automóvil fue examinado por las autoridades a fin de verificar si estaba relacionado con el secuestro.
También establecieron controles en las carreteras de la región de Gush Etzión y de Hebrón, y realizaron registros en el área palestina de Sanjar y en la localidad vecina de Dura, al suroeste de Hebrón.
Además de las fuerzas terrestres, las FDI desplegaron efectivos aéreos y erigieron puestos de control en el puente de Hallul y en la aldea de Beit Kahil, al noroeste de Hebrón, para ampliar el cerco a fin de impedir cualquier intento de paso hacia la frontera con Jordania.
Asimismo, cerraron los dos principales puntos fronterizos entre Israel y la Franja de Gaza para evitar que los jóvenes sean trasladados a ese territorio controlado por Hamás.
A su vez, el portavoz de los servicios de seguridad de la AP, el general Andan al-Damiri, calificó de «locura» las acusaciones de Netanyahu, al subrayar que el Gobierno palestino no dispone de «ningún poder» en la región de Gush Etzión, ubicada en la Zona C bajo control total civil y militar de Israel.
Entrevistado por el Canal 2 israelí, Issa Qaraqe, ministro de la AP responsable por los presos palestinos encarcelados en Israel, dijo que Netanyahu se comunicó con Abbás.
«Los servicios de seguridad de la AP cooperan con las agencias israelíes para recabar informaciones sobre la desaparición de los jóvenes», afirmó.
Nadie hasta ahora se responsabilizó de manera oficial por los hechos. Pero algunos medios indicaron que el grupo armado radical salafista Daulat al-Islam, afiliado a Al Qaeda, se adjudicó el secuestro.
Sin referirse específicamente a la desaparición de los tres jóvenes, el brazo armado de Hamás, las Brigadas Izz ad-Din al-Qassam, afirmó en su página web que «mientras haya una resistencia palestina en Cisjordania, el ocupante israelí nunca se sentirá seguro».
Estos hechos son los primeros potencialmente graves desde la formación a principios de mes del Gobierno de unidad nacional palestino encabezado por Abbás con respaldo de Hamás.
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