El actor británico Gary Oldman (56) pidió disculpas a la comunidad judía por haber afirmado que Hollywood era «mantenida por judíos», un mea culpa juzgado insuficiente por la asociación de lucha antisemita.

Oldman expresó sus «remordimientos» en una carta enviada al Centro Simon Wiesenthal y a la Liga Antidifamación (ADL), una asociación de lucha contra el antisemitismo, por sus palabras «hirientes respecto a muchos judíos».

«Tengo remordimientos sobre los comentarios que hice hace poco en la revista Playboy y que pudieron ofender a muchos judíos», señaló Oldman sobre la entrevista que concedió a la popular revista norteamericana.

«Al leerlos, me doy cuenta de que son muy poco sensibles y que pueden haber contribuido a fomentar un estereotipo falso», agregó.

El artista británico hizo esas declaraciones al hablar sobre la situación que atraviesa su colega, Mel Gibson, quien sigue excluido de Hollywood por haber hecho unos comentarios contra la comunidad judía en 2006.

«Mel Gibson vive en una ciudad mantenida por judíos y en la que dijo lo que no debía, porque mordió la mano que le dio de comer», afirmó a Playboy el actor de «Batman: El caballero de la noche asciende».

La ADL señaló que Oldman «debería ser más inteligente en lugar de repetir la antigua retórica antisemita sobre el control de los judíos en Hollywood», mientras que el rabino Marvin Hier, del Centro Simon Wiesenthal, declaró que el actor pretende que «los judíos se olviden de lo que dijo Mel Gibson».

«Espero que crean en la sinceridad de mis disculpas. Tengo una enorme afinidad personal con los judíos en general y particularmente con aquellos que están presentes en mi vida», precisó Oldman en su carta.

«El pueblo judío, perseguido durante muchos años, fue el primero en escuchar la voz de Dios y por supuesto es el pueblo elegido», añadió.

Sin embargo, la ADL estimó que las declaraciones no eran suficientes. «Quieran o no, las celebridades son verdaderos modelos y tienen una responsabilidad sobredimensionada sobre sus palabras y actos», expresó su director Abraham Foxman.

«Me parece que las disculpas de Gary son sinceras y elegantes. Creo que la gente debe decidir qué pensar», dijo el representante del actor.
Un portavoz del Centro Simon Wiesenthal negó haber recibido las disculpas.

«Vimos notas en la prensa, pero no recibimos nada escrito», informó el vocero de la institución, Marcial Lavina.

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