Judíos ultraortodoxos de la ciudad de Beit Shemesh, próxima a Jerusalén, protagonizaron disturbios y enfrentamientos con la policía de Israel a raíz de conflictos por segregación de sexos.
La policía reforzó ayer sus patrullajes en la ciudad a raíz de la fuerte tensión provocada en los últimos días por la discriminación contra mujeres impuesta por una franja radical de la población religiosa.
Varios manifestantes fueron arrestados luego de haber enfrentado a la policía e insultado y amenazado a periodistas.
Ya el domingo un equipo de una red de televisión israelí había sufrido agresiones al filmar las indicaciones callejeras que piden que las mujeres no estacionen delante de una sinagoga.
"Un hombre fue arrestado luego de la agresión a la cadena de televisión", dijo el portavoz de la policía, Micky Rosenfeld.
Por toda la ciudad es posible ver carteles donde se ordena a las mujeres que se visitan "modestamente", según los principios del judaísmo ultraortodoxo, es decir con brazos y piernas enteramente cubiertos.
Un segmento de la población más radical adoptó una visión rigurosa de la separación entre hombres y mujeres en la zona.
La prensa israelí se hizo eco en la última semana de numerosos incidentes en que mujeres fueron víctimas de agresiones por parte de judíos ultraortodoxos por negarse a sentarse en la parte trasera de los autobuses.